Cientos de espacios sin cita estarán disponibles para los trabajadores de restaurantes y supermercados mientras Long Beach trabaja para vacunar a los empleados de la industria alimentaria.
Long Beach envió una invitación a los empleados que son la columna vertebral de la industria alimentaria de la ciudad: visite el Centro de Convenciones de la ciudad el viernes y vacúnese.
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El evento de vacunación de gran tamaño de la ciudad en el 300 East Ocean Boulevard entregará vacunas a miles de personas en la industria alimentaria, incluidos los trabajadores de restaurantes y supermercados.
“Nuestra economía alimentaria es fundamental para nuestro éxito, y nos aseguraremos de que sea segura y de que los trabajadores estén vacunados”, dijo el alcalde Robert García, cuya madre y padrastro fallecieron el año pasado debido al COVID-19.
Las vacunas están programadas para comenzar a las 11 a.m. y continuar hasta las 5 p.m.
El evento incluye 500 espacios para los cuales no será necesaria una cita. Si los espacios se llenan mientras la gente espera, la ciudad hará una cita de vacunación para la semana siguiente.
Se requerirá prueba de empleo en la industria alimentaria, como un talón de pago o una identificación de empleado.
La ciudad se puso en contacto con restaurantes y mercados sobre el evento en un esfuerzo por vacunar a todos los trabajadores de alimentos. Cualquier persona elegible e interesada en una cita en el hogar puede visitar el formulario de solicitud del sitio web de la ciudad o llamar al 562.570.INFO (4636).
El esfuerzo de vacunación continúa durante el fin de semana con el lanzamiento de dos nuevas clínicas móviles de vacunación en Long Beach. Las unidades móviles apuntarán a propiedades de vivienda para personas mayores y residentes confinados a sus hogares.
El veinte por ciento de los elegibles en Long Beach para la vacuna han recibido una inyección, dijo el alcalde García.
El condado de Los Ángeles está en camino de salir del restrictivo nivel púrpura de la hoja de ruta de reapertura económica de cuatro niveles del estado a fines de marzo. Si avanza al nivel rojo menos restrictivo, se podría autorizar la apertura de más negocios, incluidos restaurantes en el interior, cines y gimnasios, todos con capacidad limitada.
Las cifras publicadas por el estado el martes sitúan la tasa diaria promedio ajustada del condado de nuevas infecciones por COVID-19 en 7.2 por cada 100,000 residentes. Si ese número cae a 7 por cada 100.000 habitantes y se mantiene en ese nivel durante dos semanas, el condado podrá salir del restrictivo nivel púrpura del “Plan para una economía más segura” del estado y pasar al nivel rojo.
Mientras tanto, el estado anunció un cambio de política importante el jueves, desviando el 40% de todos los suministros de vacunas a las personas de las comunidades de bajos ingresos más afectadas por la pandemia.
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Junto con ese cambio, cuando el estado alcance hitos seleccionados en la cantidad de vacunas en esas comunidades, ajustará las tasas de casos requeridas para permitir que los condados avancen más fácilmente en el plan de reapertura.
Pasar al nivel rojo del plano también permitiría que se reanude la instrucción en persona para los estudiantes en los grados 7-12. El condado ya cumple con los requisitos para las clases presenciales desde el jardín de infantes hasta el sexto grado.
