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Asilo enfrenta una demanda por la muerte de un padre de familia

Ricardo Saldaña, de 77 años falleció de COVID-19 el pasado 13 abril en el asilo Glenhaven.

Telemundo

Los familiares de un hombre de 77 años que murió de COVID-19 demandaron a un asilo en Glendale, alegando que el centro de cuidado no hizo nada para evitar su contagio.

Según el Departamento de Salud, los centros de cuidado para personas de la tercera edad han sido el foco de infección de COVID-19 en el condado Angelino, y esta es una de las primeras demandas civiles por negligencia entabladas en contra de un asilo.

Jackie Saldaña asegura que la muerte de su padre, que era cuidado en el asilo del Glendale para personas de la tercer edad, pudo  haber sido evitado.

“Mi papá estuviera todavía aquí, pero ellos lo mataron porque no previnieron nada”, dijo Saldaña.

Ricardo Saldaña, de 77 años falleció de COVID-19 el pasado 13 abril en el asilo Glenhaven. 

“Glenhaven nos traicionó dejando una enfermera infectada trabajar allí, sin decirle a nadie”, señaló Saldaña.

Según la hija de la víctima, Saldaña que padecía de problemas cardiacos y sufrió un derrame cerebral que lo dejó parcialmente paralizado, se contagió en el asilo a finales de marzo.

“Pusieron a un paciente con COVID-19 en el cuarto de mi papa, mi papá siempre estaba solo y no estaba infectado”, dijo la hija de la víctima.

El abogado de la familia Saldaña anunció el jueves que entabló una demanda civil en contra de Glenhaven Healthcare, alegando presunta negligencia, homicidio culposo, descuido y abuso.

“A los trabajadores [del asilo Glenhaven] les dijeron que no se pusieran mascaras, porque no las necesitaban”, contó Saldaña.

El representante legal de la familia afirma que se han registrado unas diez muertes en el asilo por COVID-19.

Sin embargo, el más reciente informe de las autoridades de salud pública indica cinco decesos, 15 empleados contagiados y 17 residentes.

“[La muerte de su papa fue] muy triste, no hubo velorio, tuvimos que enterrarlo desde el carro”, dijo Saldaña.

Los asilos representan casi la mitad de los casos de COVID-19 en el Condado de Los Ángeles, y el supervisor Mark Ridley-Thomas ha pedido una investigación del inspector general y la continuación de una auditoría de hace cinco años.

Citando leyes de privacidad, el asilo Glenhaven señaló a través de un comunicado lo siguiente: “no podemos discutir datos específicos de pacientes. Nuestras enfermeras están capacitadas y siguen las directrices del Departamento de Salud y el CDC. Estamos muy orgullosos de servir a nuestros pacientes y la comunidad en tiempos de enormes retos en el sistema de salud”.

Por su parte, el gobernador de California Gavin Newsom, esta considerando una propuesta para darle inmunidad a los centros de cuidado en casos de ser demandados por la pandemia.

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