Un enlace de registro para una clínica de vacunación COVID-19 programada para el jueves en Pasadena se compartió con un gran grupo de personas que aún no son elegibles para la vacuna, dijeron funcionarios de la ciudad.
El enlace de registro se envió a un grupo de personas de entretenimiento, noticias y producción, según la ciudad. El grupo no es elegible para vacunas según las reglas estatales, a menos que cumplan con otros criterios.
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Se cree que la mitad de las 1,500 citas para la clínica del jueves no son elegibles debido a la filtración. La clínica del jueves ha sido cancelada debido a la infracción.
La ciudad está intentando contactar a esas personas.
Un reportero de LA Times llamó la atención de la ciudad para preguntar si el vínculo era legítimo.
Inicialmente, se recomendó a cualquier persona que no sea elegible y haya recibido el enlace que cancele su cita. Los funcionarios de la ciudad dijeron más tarde el martes por la mañana que la clínica había sido cancelada.
Las vacunas están disponibles para los siguientes grupos enumerados en el sitio web del departamento de salud de Pasadena.
- Obras sanitarias que brindan atención directa
- Residentes y personal de centros de cuidados a largo plazo
- Personas mayores de 65 años
- Trabajadores de cuidado infantil y maestros
- Trabajadores de la agricultura y la alimentación.
"Las personas que intentaron inscribirse para la vacunación antes de que sea su turno no recibirán la vacuna", dijo la ciudad en un comunicado. “Por favor espere su turno. Circunstancias desafortunadas como esta inhiben nuestra capacidad para vacunar a los residentes lo más rápido posible”.
Local
Pasadena reportó 10.993 casos de coronavirus y 320 muertes relacionadas con COVID-19 hasta el lunes.
Los intentos de saltarse la línea y obtener la vacuna han sido repetidamente criticados por los funcionarios de salud estatales y locales, pero el problema ha persistido. Los funcionarios de salud del condado de Los Ángeles se han ocupado de los problemas de las personas que obtienen lo que se suponía que eran códigos de registro seguros para hacer citas en clínicas de vacunas reservadas para grupos selectos de residentes.
El problema se destacó cuando el gobernador Gavin Newsom hizo una aparición en un complejo de viviendas públicas en el condado, donde se había establecido una clínica de vacunas para los residentes de bajos ingresos del vecindario, utilizando un código de registro de citas dedicado. Muchas personas que se presentaron a la clínica con citas vivían fuera del área, pero habían logrado obtener el código, lo que impedía que los residentes reales hicieran citas.
