Un agente del Departamento del alguacil del condado de Los Ángeles en Compton está demandando al condado, alegando que el departamento puso su vida en peligro cuando les informó sobre las actividades de una supuesta ganga de agentes conocidos como los "Executioners" o en español como los "Verdugos."
La demanda de Austreberto González ante el Tribunal Superior de Los Ángeles afirma que sufrió discriminación, acoso en el entorno laboral, represalias, falta de prevención del acoso, discriminación o acoso y violaciones de los derechos civiles. Él busca daños compensatorios y punitivos no especificados en la demanda presentada el jueves.
Un representante del departamento del alguacil, conocida por sus siglas en inglés LASD, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Según la demanda, González, quien es un veterano de combate condecorado del Cuerpo de Infantería de Marina con una hija diabética, llamó a una línea de información anónima en febrero para denunciar las "actividades delictivas de una pandilla adjunta en Compton Station que existía para violar los derechos del público y otros alguaciles empleados del departamento".
El departamento entregó una grabación de la llamada de González a la pandilla, poniendo en peligro al demandante, alega la demanda.
"El departamento no tomó ninguna medida para reducir a la pandilla de agentes", según la demanda.
En marzo, González se reunió con los investigadores de LASD y nuevamente denunció las actividades de los Verdugos, pero una vez más no se hizo nada, alega la demanda.
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González luego se enteró de que el departamento había tomado varias medidas afirmativas para ayudar al líder del grupo, Jaime Juárez, para que volviera a patrullar después de que se le había prohibido patrullar anteriormente debido a su participación en tiroteos cuestionables, alega la demanda.
Juárez, quien había sido transferido del Compton Station debido a su presunta actividad de pandillas y crimen organizado, fue trasladado de regreso a la estación por el departamento, según los documentos judiciales del demandante.
“Esto creó una cultura de impunidad y violencia en la estación de Compton que había sido conformada y habilitada por el departamento,” dice la demanda.
Un asociado de los Verdugos fue ascendido a diputado de vigilancia, un cargo cuál González merecía por su antigüedad, según la demanda, que afirma que el cargo fue para el otro diputado porque tenía prohibido portar arma de fuego mientras estaba de servicio y el trabajo de ayudante de vigilancia le permitió cobrar un salario sin salir de patrulla.
Temiendo por su seguridad y consciente de un violento ataque de la pandilla contra otro agente de estación, González se comunicó con un abogado para que lo representara en sus disputas con el LASD, según la demanda.
