Los maestros de Los Ángeles regresarán a las aulas el miércoles.
El presidente de United Teachers Los Angeles, Alex Caputo-Pearl, anunció el martes en la noche la aprobación de un acuerdo sobre un nuevo contrato que pondrá fin a la primera huelga de maestros de Los Ángeles en 30 años.
Caputo-Pearl dijo que el acuerdo está asegurado de ser ratificado y que los maestros volverán a sus aulas el miércoles, dijo Caputo-Pearl.
Una multitud de maestros mostraron su alegría por la aprobación luego de que se anunció un acuerdo tentativo el martes entre los funcionarios escolares de Los Ángeles y el sindicato. Este acuerdo permitirá a los educadores regresar a las aulas después de una huelga de seis días en el segundo distrito más grande de la nación.
El alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, acompañado por los líderes de Maestros Unidos de Los Ángeles (UTLA) y el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD), anunció el acuerdo en el Ayuntamiento unas horas después de que una sesión de negociación de 21 horas terminara antes del amanecer.
"Me enorgullece anunciar que, en espera de la aprobación de los maestros representados por UTLA y el profesional educativo y esta Junta de Educación, tenemos un acuerdo que permitirá a nuestros maestros volver a trabajar en los campus mañana", dijo Garcetti.
El presidente del sindicato, Alex Caputo-Pearl, dijo que los maestros votarán el martes y que esperaba la aprobación.
Las conversaciones se reanudaron el jueves a instancias de Garcetti. El alcalde no tiene autoridad sobre el LAUSD pero buscó ayudar a ambas partes a llegar a un acuerdo después de casi dos años de conversaciones infructuosas que llevaron a la huelga.
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Los enfrentamientos por el pago, el tamaño de las clases y los niveles de personal de apoyo en el distrito con 640,000 estudiantes llevaron a su primera huelga en 30 años y motivaron la dotación de personal en las aulas con maestros y administradores sustitutos. Siguió a la huelga de docentes en otros estados que animaron el trabajo organizado.
El distrito sostuvo que las demandas del sindicato podrían llevar a la bancarrota al sistema escolar, que proyecta un déficit presupuestario de medio billón de dólares este año y tiene miles de millones obligados a pagar las pensiones y la cobertura de salud para los maestros jubilados.
Las negociaciones se rompieron en diciembre y comenzaron de nuevo este mes. El sindicato rechazó una oferta del distrito el 11 de enero para contratar a casi 1,200 maestros, consejeros, enfermeras y bibliotecarios y reducir el tamaño de las clases en dos estudiantes.
Los maestros esperaban desarrollar el movimiento "Red4Ed" que comenzó el año pasado en West Virginia y continuó a Oklahoma, Kentucky, Arizona, Colorado y el estado de Washington. Se extendió desde estados conservadores con leyes de "derecho al trabajo" que limitan la capacidad de huelga a la costa oeste más liberal con sindicatos fuertes.
