Consumer Reports realizó pruebas en 50 productos alimenticios para bebés y encontró niveles preocupantes de metales pesados en la mayoría de ellos hace cinco años.
“Encontraron que alrededor de dos tercios contenían suficiente arsénico, plomo y cadmio inorgánicos combinados que están relacionados con el posible riesgo para la salud”, dijo Horacio Perez Sandoval, portavoz de Consumers Report
Cinco años después, Consumer Reports volvió a probar siete de los alimentos para bebé que arrojaron niveles preocupantes de metales pesados en las pruebas originales.
Los niveles de metales pesados disminuyeron en tres de ellos pero para otros tres, los niveles siguen siendo lo suficientemente altos para ser motivo de preocupación.
Según Consumer Reports no hubo cambios en el séptimo producto.
“En el 2018 y en nuestras pruebas recientes, las meriendas para bebés, como los pufs, y los productos elaborados con camote y arroz fueron los peores”, dice Perez Sandoval.
Responde
“Eso es porque ciertas plantas, como el arroz, absorben niveles más altos de metales pesados que otras plantas”.
Beech-Nut, Gerber, Earth's Best y Happy Family respondieron a Consumer Reports en relación con el estudio. Señalaron que sus productos eran seguros y que los metales pesados se encuentran naturalmente en el medio ambiente en el que se cultivan estos alimentos. Los fabricantes de los productos Baby Mum no respondieron.
Gerber explicó, en respuesta directa a Telemundo Responde, que estos metales ocurren naturalmente en la tierra y el agua y no son agregados durante el proceso de producción.
Aseguraron que estan trabajando con sus agricultores para elegir lugares de cultivo óptimos y probar sus productos, el agua, los ingredientes y alimentos para que sean seguros.
Beech-Nut dijo que analiza tanto las materias primas como los productos en su laboratorio, agregando que ellos han dejado de producir productos de arroz debido a las inconsistencias en los niveles de arsénico.
Las otras empresas no respondieron a solicitudes de Telemundo Responde.
Problemas en la salud a largo plazo
Ingerir metales pesados a largo plazo puede conducir a un mayor riesgo de varios problemas de salud, que pueden incluir, entre otros:
- un coeficiente intelectual más bajo;
- problemas de comportamiento relacionados al desorden de déficit de atención y autismo;
- un mayor riesgo de cáncer y otros problemas en los niños pequeños.
Los expertos de Consumer Reports consideran que, aun con los niveles nuevos, es importante reducir la exposición y proteger a su familia.
“No quieres eliminar por completo los alimentos como los camotes, porque sí tienen valor nutricional”, dijo Perez Sandoval. “Solo recuerda; la variedad es la clave. asegúrate de que tus hijos coman una amplia variedad de alimentos saludables”.
Las opciones bajas en metales pesados incluyen:
- cereales para bebés hechos de avena y otros granos integrales que no sean arroz;
- fruta fresca y congelada;
- huevos;
- frijoles;
- puré de manzana;
- queso; y
- yogurt.
Los expertos también recomendaron reducir la cantidad de pufs y galletas para los dientes que le da a sus bebes, pues es más probable que estos tengan un alto contenido de metales pesados y sean alimentos altamente procesados.