La Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles rechazó una moción de las supervisoras Kathryn Barger y Janice Hahn para reconsiderar la prohibición de comer al aire libre debido al aumento de casos de coronavirus.
El rechazo significa que la prohibición entrará en vigencia según lo programado a las 10 p.m. el miércoles.
La acción se produjo cuando la Asociación de Restaurantes de California demandó al condado de Los Ángeles el martes en un esfuerzo por anular el plan del condado para terminar con las comidas en persona debido al reciente aumento en los casos de COVID-19.
"La orden reciente sin una base científica declarada del condado de Los Ángeles señala una industria específica y podría poner en peligro miles de puestos de trabajo", dijo Jot Condie, presidente y director ejecutivo de la Asociación de Restaurantes de California, en un comunicado anunciando el desafío legal. miles de restaurantes y muchos miles de empleados más que podrían estar en la calle justo antes de la temporada navideña ".
La restricción del condado, que pone fin a las comidas en persona durante tres semanas está programada para entrar en vigor a las 10 p.m. del miércoles. Los abogados de la Asociación de Restaurantes le pidieron a un juez el martes por la mañana una orden de restricción que impida que la prohibición entre en vigencia, pero la solicitud fue rechazada. Sin embargo, la demanda continuará.
El abogado de la asociación, Dennis Ellis, dijo a los periodistas que estaba decepcionado con el fallo, pero dijo que la organización no ha visto ninguna evidencia de que las comidas al aire libre, que ya estaban restringidas a la mitad de la capacidad total la semana pasada, hayan alimentado el aumento del coronavirus.
"No hemos podido ver qué tiene el condado para respaldar la idea de que comer al aire libre al 50% de su capacidad, de acuerdo con lo que el gobernador ha autorizado en su plan, es inapropiado y debe cerrarse", dijo Ellis.
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La prohibición se anunció el domingo por la noche cuando el promedio de cinco días de casos nuevos diarios del condado superó el umbral de 4.000.
El condado estableció el umbral la semana pasada, junto con un nivel más restrictivo que desencadenaría una nueva orden de permanencia en el hogar si el promedio diario de casos de cinco días superaba los 4.500. El condado alcanzó ese umbral el lunes.
La Junta de Supervisores del condado debatirá las nuevas restricciones en su reunión del martes. El lunes, la supervisora Kathryn Barger dijo que hablaría en contra de la prohibición de las comidas en persona, diciendo que amenazaría a cientos de miles de empleos. También cuestionó si los restaurantes son la principal fuente del actual aumento del virus en el condado, que se ha atribuido más a las reuniones privadas.
La supervisora Sheila Kuehl, sin embargo, defendió la prohibición y señaló que los cinco supervisores la aceptaron hace una semana. "Comer al aire libre es probablemente más peligroso en términos de contagio que cualquier otro tipo de negocio", dijo Kuehl.
Ella dijo que los comensales en los restaurantes "se sientan durante horas sin cubrebocas" y están muy cerca de los meseros y los clientes que pasan.
Además de la impugnación judicial de la CRA, los propietarios del restaurante Engine Co. 28 en el centro de Los Ángeles también presentaron una demanda contra el condado el martes.
La ciudad de Long Beach, que tiene su propio departamento de salud, también planea ofrecer comidas en persona el miércoles por la noche. La Asociación de Restaurantes de Long Beach criticó la medida y planea realizar una conferencia de prensa el miércoles exigiendo una reunión con los funcionarios de salud de la ciudad y el condado.
En un comunicado, la asociación acusó a los funcionarios de salud de atacar a un "blanco fácil" al que culpar por el aumento de casos, sin ninguna evidencia.
La ciudad de Pasadena, que también tiene su propio departamento de salud, aún no ha emitido una prohibición para las comidas en persona, y los funcionarios dicen que la situación se revisará a diario antes de que se tomen medidas.
