Las estafas telefónicas que buscan robarle a la gente su pago por impacto económico del COVID-19, se duplicaron en junio, y según las autoridades los trucos que usan los delincuentes, están cambiando con más frecuencia.
Un estudio reciente revela que, en los últimos dos meses, se alcanzó la cifra récord de llamadas fraudulentas específicamente buscando robarse ese dinero, donde 1.1 millones de personas las recibieron.
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Aunque muchos las ignoran, las llamadas automatizadas, siguen generándose por millones, y muchas, son hechas por estafadores, en busca de víctimas.
Un estudio reciente de HIYA, una empresa identificadora de llamadas telefónicas, que analizó más de 13 mil millones de llamadas mensualmente durante el último año, reveló que las llamadas fraudulentas que buscan específicamente robarse el dinero del pago por impacto económico del COVID-19, aumentaron un 150% la primera semana de junio, y se duplicaron, si se comparan con las que se hicieron el año pasado.
Las estafas más comunes buscan robar el número de identificación personal del beneficiario.
Los estafadores le aseguran que están tratando de verificar su información para enviarle el pago, pero solo quieren sus datos, para ellos poder cobrarlo.
Otra táctica común que usan, es pedirle a la víctima su número de cuenta bancaria, para presuntamente depositarles el dinero inmediatamente, pero lo que realmente buscan es retirar dinero de sus cuentas.
Y otro método, es el más común, en el que el estafador se hace pasar por representante del gobierno, y le ofrece darle un avance de su pago, o condonarle deudas fiscales, a cambio de que usted les entregue su cheque o pago por impacto económico.
California está en segundo lugar entre los estados más afectados por este tipo de estafas, así que, los expertos recomiendan lo siguiente:
- no conteste o devuelva llamadas a números que no reconozca;
- bajo ninguna circunstancia de su número de cuenta bancaria, Seguro Social o cualquier otro dato personal a alguien que le diga llamar del gobierno federal. Es importante recalcar que el gobierno jamás requerirá esos datos por teléfono.
- y, considere pedirle a su proveedor de servicio celular que le instalen protección contra llamadas fraudulentas, algunos como AT&T ofrecen esa herramienta gratuitamente, y si el suyo no la tiene, considere usar aplicaciones como HIYA, que permiten instalar un filtro de alerta que bloquea esas llamadas no deseadas.
En el 2020, las víctimas de estas estafas reportaron perdidas de promedio de $182.00, pero el 7% de la gente reportó haber perdido más de mil dólares.
Así que tenga mucho cuidado, y no caiga en estos trucos. De preferencia, solo conteste el teléfono si reconoce el número de quien esté llamando.
