Los equipos regresaron al trabajo el lunes por la mañana en el puente de la Calle Sexta, limpiando el grafiti dejado por los vándalos.
Después de gastar $588 millones en el puente, el condado de Los Ángeles está gastando más dinero para mantenerlo seguro y limpio, y gran parte del trabajo que se dedica a esos esfuerzos se lleva a cabo en las primeras horas de la mañana antes de que la ciudad se despierte.
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Los esfuerzos de limpieza comienzan en el punto medio del puente, con cuadrillas caminando hacia las otras áreas con graffiti.
"Comenzamos aquí porque es el lugar más seguro para estacionar, y luego comenzamos a quitar el grafiti a medida que subimos", dijo Humberto Bautista, subdirector de la Oficina de Embellecimiento Comunitario de la Ciudad. "Comenzaremos en el medio en dirección a Boyle y luego regresaremos al otro lado".
El graffiti comenzó a aparecer en el puente casi inmediatamente después de su apertura, con pocas señales de desaceleración.
Bautista y su equipo del Programa de Alternativas a Pandillas tienen planes de limpiar el puente todas las mañana.
“Estamos quitando las calcomanías. Hay mucho grafiti en las paredes y los cubrimos con pintura", dijo Bautista. También lo hemos visto en el suelo.
Bautista agregó que también hay una gran cantidad de basura en el puente, así como "botellas de agua y bolsas de bocadillos".
El puente ha visto mucha actividad policial en los últimos días, ya que las autoridades intentan mantener el puente y poner fin a las actividades ilegales que tienen lugar allí.
“Es una pena porque es un puente nuevo y aquí tenemos que mantenerlo”, dijo Bautista.
Bautista llevó a su familia al puente durante el fin de semana, esperando "tener una linda vista y todo", y, en cambio, fue recibido con un puente cerrado y actividad policial.
"Desearía que [los vándalos] apreciaran el nuevo puente que tenemos", dijo.
El equipo de limpieza de Bautista, parte del Programa Alternativo de Pandillas, trabajará durante cinco horas el lunes para eliminar el grafiti, a partir de las 5:30 a. m.
