El Departamento de Salud del Condado de Los Ángeles ha comenzado a cerrar restaurantes que se han transformado en tiendas de comestibles emergentes como un medio para mantenerse en el negocio durante la pandemia de COVID-19.
Los restaurantes convertidos en tiendas son populares entre los consumidores que necesitan comprar pero quieren evitar los supermercados abarrotados, y les da a los restaurantes una fuente de ingresos que les salva la vida.
"Tenemos mucho papel higiénico, muchos productos y frutas y todo. Así que, en lugar de dejar que todo esto se desperdicie, abramos y ofrezcamoslo al vecindario", dijo Robert Kronfli, copropietario del restaurante Bacari en Playa del Rey.
Kronfli dice que los residentes del área acudían en masa a su restaurante para comprar más de 40 artículos, incluyendo leche, carnes, harina y otros productos básicos típicos de los supermercados.
Pero Bacari tuvo que cerrar temporalmente el viernes, cuando apareció un inspector de salud del condado de Los Ángeles y le ordenó "suspender inmediatamente todas las ventas de alimentos" porque el restaurante estaba "operando fuera del alcance de su permiso", según un informe de inspección obtenido por el equipo de investigación (I-Team) de la cadena hermana NBC4.
"Estábamos un poco conmocionados por eso, y todavía estamos un poco conmocionados por lo duros que están siendo al respecto", dijo el dueño de Bacari, Kronfli.
Según la Asociación de Restaurantes de California, casi un tercio de los restaurantes de California podrían cerrar debido a las órdenes de quedarse en casa ordenadas durante la pandemia de coronavirus.
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Por lo tanto, al menos dos docenas de restaurantes del área de Los Ángeles se han convertido en tiendas emergentes como una forma de seguir ganando dinero y permanecer abiertos, como tres restaurantes Bacari en Playa del Rey, West Hollywood y Glendale.
"Nos ha brindado la oportunidad de mantener nuestras puertas abiertas, contratar a una gran cantidad de personal y continuar obteniendo suministros muy necesarios para el vecindario", dijo Krofli.
Algunos de esos restaurantes ahora solo están entregando órdenes de comestibles en la acera. Pero el dueño de Bacari dice que casi el 90% de sus ventas fueron de clientes que quieren entrar, ver y elegir entre los cuarenta artículos.
Pero al Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles claramente no le gusta esa idea.
"No puede simplemente decidir que va a vender comestibles", dijo la Dra. Barbara Ferrer, directora de salud pública del condado de Los Ángeles.
Algunos restaurantes como Bacari han ofrecido limitar la cantidad de clientes permitidos adentro al mismo tiempo y hacer cumplir las pautas de distanciamiento social. Pero el departamento de salud indicó que no permitiría a los clientes comprar alimentos dentro de los restaurantes, incluso durante la pandemia.
"Aprecio toda la innovación, pero las tiendas de comestibles tienen licencia, y cualquier persona que quiera ser una tienda de comestibles necesita obtener una licencia", dijo Ferrer.
Un portavoz de la Asociación de Restaurantes de California dijo al I-Team que ha estado en conversaciones con el departamento de salud desde el fin de semana, con la esperanza de encontrar un compromiso para que los restaurantes puedan operar como tiendas de comestibles durante la pandemia.
