El número de pacientes positivos con COVID-19 en los hospitales del condado de Los Ángeles se han reducido a 1,391, frente a los 1502 del día anterior. Esto es una gran caída desde mediados del mes pasado, cuando se situó en más de 4,800, según las últimas cifras estatales.
De esos pacientes hospitalizados hasta el domingo, 301 estaban en cuidados intensivos, por debajo de los 305 del día anterior.
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Los últimos números se produjeron cuando los funcionarios de salud locales informaron otros 58 muertes asociadas con COVID-19 y 2,780 nuevas pruebas positivas de COVID-19.
El número de los casos y las muertes probablemente reflejen retrasos en la notificación durante el fin de semana, según el Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles.
Los números del domingo elevaron los totales acumulativos del condado a 2,782,953 casos y 30,356 muertes desde que comenzó la pandemia.
La tasa promedio móvil de personas que dieron positivo por el virus fue 1.9% a partir del domingo, por debajo del 2% del sábado, el 2.2% del viernes y el 3% del lunes pasado.
La caída en curso en las hospitalizaciones llevó al condado la semana pasada a eliminar su requisito de uso de cubrebocas para megaeventos y espacios al aire libre, y en escuelas y guarderías. El mandato de las mascarillas en interiores del condado permanece en efecto, a pesar de que el estado ha levantado su regla de uso de máscaras en interiores.
La regla del condado permanecerá vigente hasta que su tasa de transmisión, como definida por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EEUU este en nivel “moderado” y permanezca así durante dos semanas. Eso requiere que el condado debería de llegar a una tasa de infección de 50 por cada 100,000 habitantes. A partir del viernes, la tasa del condado era de 300 por 100,000.
Esa tasa ha ido cayendo constantemente, y la Directora de Salud Pública, Bárbara Ferrer, le dijo a la Junta de Supervisores el martes que en el ritmo actual, el condado alcanzará la tasa “moderada” para el 16 de marzo, lo que significa que el mandato de los tapabocas en el interior se levantaría el 30 de marzo.
Según cifras publicadas la semana pasada, el 82% de los residentes elegibles mayores de 5 años han recibido al menos una dosis de la vacuna en contra el COVID-19, mientras que el 74% son completamente vacunados, y el 36% están completamente vacunados y recibieron una vacuna de refuerzo.
De los 10.3 millones de habitantes del condado en general, el 78% ha tenido al menos una dosis, el 70% está completamente vacunado y el 34% ha recibido una vacuna de refuerzo.
