Muchas personas se apegan a su fe en momentos difíciles, incluso encuentran alivio platicado con un sacerdote al enfrentar conflictos mentales.
Debido a esto, existe un enlace muy particular que muchas personas no conocen entre profesionales de la salud y líderes religiosos.
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“Siendo doctor y persona de fe es importante retomar lo bello que es la relación entre la ciencia y la religión, entre la fe y la práctica médica”, dice el Dr. Xavier Cagigas, director interino Centro de Excelencia Neuropsiquiátrico Hispano de UCLA.
“Yo soy neuropsicólogo y creo que es importante hablar de que no están opuestos. [En verdad], se complementan”.
El Dr. Cagigas es uno de los líderes en ese centro que ofrece entrenamientos bilingües a organismos que buscan mejores maneras de ayudar y responder a las necesidades psicológicas de residentes, incluyendo de feligreses católicos.
“La Arquidiócesis se ha juntado con el Departamento de Salud Mental del Condado de Los Ángeles y hemos trabajado juntos para ayudar a la gente a lidiar con el estrés crónico y con las secuelas emocionales que resultan de esta pandemia”.
Jeanette Gonzalez Seneviratne, directora del cuidado integral de la persona de la Arquidiócesis Los Angeles, destaca que la comunidad muestra una confianza grande cuando se acerca a los sacerdotes en busca de ayuda.
“Como sabemos que la salud mental es un estigma, cuando tienen estos desafíos en sus hogares vienen al sacerdote”, señala González Seneviratne.
Más de 40 iglesias en el condado de Los Ángeles cuentan con ministerios de salud mental.
“Yo puedo ayudarle de una forma, pero muchos como UCLA y otras organizaciones tienen toda la capacidad de ayudar a la persona completamente. Por eso la conexión es real, es necesario”, dice el Padre Michael Gutiérrez, de la Iglesia San Luis de Francia en La Puente, una de las parroquias que cuenta con este ministerio.
Si usted necesita ayuda, puede comunicarse con el Departamento de Salud Mental del Condado de Los Ángeles, al 800-854-7771.
También puede contactar a su parroquia. Si no cuentan con los recursos, lo podrán referir a los lugares donde lo pueden ayudar.
“[Ser] proveedores de salud es una vocación y traemos nuestra fe”, dice el Dr. Cagigas. “Lo mejor de nosotros con esa vocación para ayudar a la gente en esos momentos de necesidad”.
