Un juez le dio el miércoles al propietario de un gimnasio de Torrance más tiempo para impugnar la solicitud del condado de una orden judicial preliminar que ampliaría una orden previa que le indicaba que se abstuviera de realizar operaciones en interiores.
La jueza del Tribunal Superior de Los Ángeles, Mary H. Strobel, fijó una nueva fecha de audiencia para el 18 de febrero para que David Fischer, propietario de Powerhouse Gym, y su abogada, April Moore, puedan obtener el aporte de un testigo experto para luchar contra la orden judicial.
Strobel dijo que la orden temporal restrictiva que impuso a Fischer y al gimnasio el 9 de diciembre seguirá en vigor hasta que se celebre la audiencia de febrero. En un fallo provisional emitido el martes, Strobel dijo que estaba dispuesta a otorgar la orden judicial preliminar.
“Los demandantes (ofrecen) evidencia que muestra que Powerhouse ha violado las órdenes de salud aplicables al realizar actividades de acondicionamiento físico en interiores durante todo el verano a pesar de múltiples ediciones de directivas escritas para tomar medidas correctivas…”, escribió el juez.
En sus documentos judiciales, Moore argumenta que dado que la FDA aprobó una vacuna para COVID-19 y se está distribuyendo, la emisión de una orden judicial preliminar constituiría una “toma gubernamental”.
En apoyo de sus argumentos para prohibir las operaciones bajo techo de Powerhouse Gym, los abogados del condado ofrecieron una declaración del inspector del Departamento de Salud Pública, Arsenio Argel.
Dijo que hizo su décima inspección del Powerhouse Gym el 24 de noviembre.
“Llegué a Powerhouse a las 9:45 am y observé al menos a dos docenas de clientes haciendo ejercicio dentro de las instalaciones en violación de las órdenes de salud y cierre”, dijo Argel de las instalaciones de Hawthorne Boulevard.
