Los votantes de California decidirán este noviembre si desean deshacerse de los impuestos a la gasolina más altos y las tarifas de registro de vehículos aprobadas el año pasado.
El secretario de Estado Alex Padilla dijo el lunes que los partidarios de la iniciativa recogieron suficientes firmas válidas para calificar para la votación.
La iniciativa de derogación del impuesto a la gasolina es una parte central de la estrategia republicana para aferrarse a escaños legislativos y parlamentarios en disputa frente a los demócratas motivados por la oposición al presidente Donald Trump. Los funcionarios del Partido Republicano esperan que la oposición al impuesto a la gasolina haga incursiones con los votantes moderados y aliente a los conservadores a emitir su voto.
Dicen que los altos impuestos a la gasolina contribuyen al alto costo de vida de California, lo que dificulta que las familias puedan llegar a fin de mes.
El gobernador demócrata Jerry Brown y otros partidarios dicen que se necesitan $ 5 mil millones al año en ingresos para mantener carreteras y puentes. La campaña de apoyo, respaldada en gran parte por sindicatos y contratistas de la construcción, enfatizan los beneficios de la reconstrucción de carreteras en ruinas para aliviar la congestión y reducir las necesidades de reparación de automóviles.
"Esta medida defectuosa y peligrosa impulsada por los aliados de Trump en Washington pone en peligro la seguridad de millones de californianos al impedir que las comunidades locales arreglen sus caminos y puentes en ruinas", escribió Brown en Twitter. "Solo di no."
Según la legislación aprobada hace más de un año, los impuestos a la gasolina aumentaron en 12 centavos por galón y el diésel en 20 centavos. Las tarifas de registro de vehículos aumentaron en 25 dólares a 175, dependiendo del valor del vehículo.
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La iniciativa revocaría todas esas alzas de impuestos y requeriría la aprobación de los votantes para cualquier aumento de ese tipo en el futuro.
"Este es un mensaje para los millones de californianos olvidados ignorados por la élite política de Sacramento, la ayuda está en camino", dijo en un comunicado John Cox, un candidato republicano a la gobernación que ayudó a liderar la iniciativa.
