El padre de un niño de 11 años que murió después de caerse de un barco cerca de Angel Island el domingo, fue arrestado bajo sospecha de homicidio vehicular y otras ofensas, dijo el lunes la policía de Tiburón.
Javier Burillo, de 58 años, estaba en un bote privado cuando sus dos hijos, el niño de 11 años y un hombre de 27 años, fueron arrojados al agua y golpeados por el bote.
El hijo mayor de Burillo pudo ayudar a Burillo a recuperar al niño de 11 años, y la embarcación fue al puerto de yates de Corinto en Tiburón, donde el niño fue declarado muerto. El hijo mayor sufrió laceraciones en las piernas y fue llevado al Hospital General de Marín, dijo la policía.
La policía de Tiburón contactó a Burillo en su cercana residencia Belvedere. Después de una investigación realizada por la policía de Tiburon y Belvedere, Burillo fue arrestado y encarcelado en la Cárcel del Condado de Marin bajo sospecha de homicidio vehicular durante la operación de un buque, daño intencional o lesión a un niño y operación imprudente o negligente de un buque, el jefe de la policía de Tiburon, Michael Cronin dijo.
Burillo está detenido en la cárcel bajo una fianza de 1 millón de dólares.
