Una madre y su hija regresaron esta semana a lo que quedó de su vivienda en un pueblo mexicano, arrasado por el narco.
Un equipo de Telemundo acompañó a Carmela Vázquez hasta Chilapa, en el estado de Guerrero, un pueblo ''fantasma'', dejado atrás por sicarios y miembros del narco que durante años ocuparon el lugar.
La mujer relató que un día, su esposo y su hijo fueron secuestrados por el narco y nunca más supo de ellos.
Una recorrida por la vivienda y el barrio dejó al desnudo el estado de abandono a lo que se suma la destrucción que causaron los narcos.
La zona ha estado bajo el control de bandas del narco que se disputan las tierras para cultivos ilícitos. A esto se añade los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, lo que convierte a la región en una zona ''caliente''.