La ola de calor que azota al sur de California entró el domingo en su cuarto día, prolongando un peligro elevado de incendios forestales y condiciones de salud peligrosas para los residentes.
Se esperaba que las temperaturas fueran un par de grados por debajo de los máximos del sábado, y las advertencias de calor para la mayoría de las áreas expiraron el sábado por la noche, aunque todavía se mantuvo un aviso hasta las 9 p.m. El domingo en las montañas del condado de Los Ángeles, donde se esperaba que los máximos oscilaran entre 96 y 106 grados en las elevaciones más bajas.
El Servicio Meteorológico Nacional recomendó a los residentes restringir las actividades al aire libre a las primeras horas de la mañana o al anochecer, usar ropa suelta y liviana de colores claros y beber muchos líquidos que no sean café o alcohol.
Las condiciones cálidas y secas presentaban un elevado peligro de incendios forestales. Los equipos del Departamento de Bomberos del Condado de Los Ángeles estaban ayudando a los equipos del Bosque Nacional de Los Ángeles a luchar contra un incendio forestal de 170 acres cerca del lago Castaic que había alcanzado un 50% de contención el domingo por la mañana.
Se esperaba que el máximo del domingo alcanzara los 89 grados en el centro de Los Ángeles, una caída de 3 grados desde el sábado. Se esperaba que las temperaturas llegaran a 94 en Pasadena y Van Nuys, 92 en Burbank, 101 en Woodland Hills y 103 en Palmdale.
La calidad del aire no fue saludable el domingo en el este del Valle de San Gabriel y las montañas de San Gabriel, según el Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles. Además, la calidad del aire no era saludable para las personas sensibles en el Valle de San Fernando, el Valle de Santa Clarita, el Valle del oeste de San Gabriel y el área de Pomona / Walnut Valley.
Se espera que las temperaturas disminuyan ligeramente el lunes antes de volver gradualmente a la normalidad esta semana.
