Un hombre de Hawthorne fue sentenciado este jueves a 212 años en una prisión federal por defraudar a las compañías de seguros después de lanzar su auto con sus dos hijos discapacitados y a su ex esposa desde un muelle en el Puerto de Los Ángeles para cobrar las pólizas de muerte accidental, un ardid que el juez denomino “malvado y diabólico”
Alí Elmezayen fue condenado en octubre de 2019 por más de una docena de cargos federales, incluido fraude postal y electrónico, robo de identidad agravado y lavado de dinero. Los fiscales federales carecían de jurisdicción para los cargos federales de asesinato.
Manténte al tanto de las noticias locales y del estado del tiempo. Suscríbete a nuestros newsletters gratuitos aquí.
Sin embargo, el hombre de Hawthorne enfrenta cargos de asesinato en el Tribunal Superior de Los Ángeles derivados de la muerte de sus dos hijos con autismo grave, Elhassan de 13 años y Abdelkarim de 8, junto con el intento de asesinato de su ex esposa Rehab Diab, quien logró escapar del auto sumergido a pesar de no saber nadar.
“Asesinó a sus dos hijos autistas, dejando que dos jóvenes inocentes sufrieran una muerte extraordinariamente dolorosa mientras estaban atados en sus asientos (del automóvil) '', dijo a la corte el juez federal de distrito John F. Walter. “Es indiscutible que la muerte por ahogamiento es una forma dolorosa de morir. Solo puedo imaginar el horror que deben haber experimentado mientras luchaban por levantarse de sus asientos ... mientras sus pulmones se llenaban de agua”.
El 9 de abril de 2015, Elmezayen condujo el automóvil que contenía a Diab y sus dos hijos fuera del muelle y escapó nadando rápidamente por la ventana abierta del lado del conductor, según mostró la evidencia. Diab sobrevivió cuando un pescador le arrojó un dispositivo de flotación y tiró de ella hacia una escalera, pero los dos niños, atados a los asientos del automóvil, se ahogaron.
Elmezayen, un nativo de Egipto sin estatus legal en los Estados Unidos, había estado planeando el plan durante dos años, según las pruebas presentadas durante el juicio. Durante 2012 y 2013, adquirió $7 millones en cobertura de seguro de vida y muerte accidental para su familia con ocho compañías diferentes. Después de las muertes, recaudó casi $262,000 en ingresos del seguro, dijo Walter, quien ordenó que se pagara una restitución por ese monto a dos compañías de seguros.
Local
Durante su juicio en la corte federal de Los Ángeles, los fiscales dijeron que Elmezayen, de 46 años, era un esposo abusivo acosado por problemas económicos.
“Alineó el auto hasta el único lugar que no estaba bloqueado y pisó el acelerador, los niños se abrocharon adentro '', dijo al jurado el fiscal federal adjunto David T.Ryan. “El plan era matarlos y hacer que pareciera un accidente”.
Después de las muertes, Elmezayen presentó una demanda contra la ciudad de Los Ángeles “donde trató de cobrar más dinero de las muertes culpando a la ciudad por la pérdida de sus hijos”, dijo el juez, calificando al acusado de “codicioso” y asesino brutal”.
El acusado no subió al estrado durante su juicio en el centro de Los Ángeles y se negó a dirigirse al tribunal en su audiencia de sentencia el jueves.
Un tercer hijo, Elhussein Diab, que estaba en el campamento cuando ocurrieron las muertes, habló en la audiencia y dijo que su padre había tratado las tumbas de sus hermanos fallecidos
“como una cuenta bancaria”.
La Oficina del Fiscal de Distrito inicialmente se negó a presentar cargos de asesinato, concluyendo que la evidencia era insuficiente para demostrar que el accidente fue intencional.
Pero a pesar de carecer de jurisdicción para los cargos federales de asesinato, la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos en Los Ángeles, en colaboración con el FBI, estableció que Elmezayen diseñó su plan con la intención de defraudar a las compañías de seguros de vida.
Después de que los fiscales federales compartieron nuevas pruebas, las autoridades estatales volvieron a examinar el caso y posteriormente presentaron cargos de asesinato contra Elmazayen. No se supo de inmediato cuándo o si continuará el caso estatal.
