Echo Park Lake reabrirá al público a las 3 p.m. el 26 de mayo, la oficina de Mitch O'Farrell anunció el miércoles, dos meses después de que organizó el cierre del parque después de que unas 200 personas sin hogar se establecieran allí durante la pandemia de COVID-19.
La reapertura se produce después de que los equipos de saneamiento y medio ambiente de Los Ángeles retiraron lo que cuantificaron alrededore de 35.7 toneladas de desechos sólidos del lugar.
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El parque se sometió a limpieza y reparaciones por un valor de $600,000, incluido el reemplazo de la superficie del patio de recreo, la actualización de los baños y los accesorios de iluminación exterior a LED, el reemplazo de cinco fuentes para beber, la mejora de los postes de luz en el área, la mejora y la pintura del exterior del cobertizo para botes del lago, la mejora del puente del lago, remodelación del césped del parque y mejora del riego.
El 22 de marzo se corrió la voz de que el parque estaría cerrado por reparaciones, pero muchos en la comunidad lo vieron como un esfuerzo velado para eliminar a los cientos de angelinos sin vivienda que se establecieron en el parque durante la pandemia de COVID-19.
La medida fue recibida con grandes protestas, en las que los agentes arrestaron a 182 personas.
Los manifestantes criticaron a la ciudad por obligar a los residentes del parque a salir de un área que se había convertido en lo que llamaron una comunidad de apoyo, que incluye un huerto, duchas que funcionan y una cocina compartida. Muchos vecinos se habían quejado del aumento de la basura en el parque y dijeron que ya no se sentían seguros allí.
O'Farrell y el alcalde Eric Garcetti dijeron que el sitio se había vuelto peligroso, con sobredosis de drogas y cuatro muertes allí.
“Durante más de un año, mi equipo trabajó incansablemente para proporcionar recursos, servicios y, en última instancia, viviendas de transición a las personas sin hogar en Echo Park Lake”, dijo O'Farrell el miércoles.
“A medida que pasaba el tiempo, las condiciones en el parque se volvieron cada vez más inseguras para todos: visitantes y habitantes del parque. Echo Park Lake es un espacio público compartido, y las personas sin vivienda vivían en condiciones inhumanas, por lo que a todas las personas sin hogar en el parque se les ofreció vivienda y servicios de transición”.
Mientras que O'Farrell y Garcetti declararon que la operación fue un éxito , quienes se oponen a la limpieza del parque, incluida una coalición de profesores de la USC, UCLA, UC Irvine y Occidental College, señalaron que la mayoría de las opciones de vivienda eran temporales y algunas estaban en refugios colectivos en medio de una pandemia.
“Primero, las colocaciones en refugios provisionales no deben equipararse con albergar a personas”, declaró la facultad en una carta a la ciudad el 31 de marzo. “Sin un camino claro hacia la vivienda permanente, dicha vivienda temporal sirve como una parada más en el ciclo interminable de desplazamiento. Muchas de las ubicaciones de Echo Park Lake se realizaron en hoteles y moteles de Project Roomkey, en lugares tan distantes como Palmdale”.
Agregaron que algunos residentes de Project Roomkey afirman que viven bajo estrictos toques de queda y condiciones similares a las de una prisión mientras viven en hoteles de la ciudad, y sienten que tienen que “cambiar su autonomía y dignidad por una cama”.
Los residentes de Project Roomkey formaron una organización, Unhoused Tenants Against Carceral Housing, y programaron una conferencia de prensa fuera del Ayuntamiento el miércoles para exigir un mejor trato en Proyecto de vivienda Roomkey.
Afirman que experimentan “toques de queda debilitantes que les impiden llegar a un empleo estable, confiscación de suministros de supervivencia como alimentos y utensilios para comer, aislamiento social extremo, acoso por parte de la seguridad, falta total de privacidad, falta de transparencia sobre su futuro en el programa y otras reglas punitivas que marginan aún más a los angelinos más pobres”, según un comunicado de la organización.
