Padres de familia que realizan labores esenciales han encontrado una mano amiga en un programa de guarderías que se ha mantenido abierto para que ellos puedan regresar a sus empleos durante la pandemia
Estos padres, sin embargo, han tenido que tomar medidas severas para que esto sea posible.
Han sido cambios que, según la directora del programa, se mantendrían hasta nuevo aviso aunque hasta ahora parecen estar funcionando.
El programa de guarderías bajo el Consorcio del Desarrollo de Ninos de Los Ángeles o Child Development Consortium of LA los hijos de trabajadores esenciales han estado recibiendo cuidado en medio de la pandemia.
“De esos 11 centros, cinco de ellos son para empleados del hospital general, del Hospital de Olive View en Sylmar, el Departamento de Transportación en el centro de Los Ángeles", dijo Selma Sánchez, directora Child Development Consortium of Los Angeles.
Incluso para el personal de Obras Públicas, explicó la directora.
Antes de la crisis de salud, centros como Nueva Maravilla Child Development Center en la César Chávez, recibían a un gran número de menores de familias de bajos de recursos. Esa cifra ha cambiado al igual que las normas recomendadas por autoridades de salud.
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"Nuestra capacidad era para 76 niños ahora solo puedo tener 22 niños, y ha sido un cambio drástico en esos números", señaló Claudia Gutierrez, Director Nueva Maravilla Child Development Center.
Cada salón no puede tener mas de 10 niños, y tanto ellos como los maestros deben seguir una rutina rigurosa.
Se lavan las manos, se toman la temperatura, y los padres ya no pueden entrar a los salones por cuestiones de prevención.
"Son un montón de cambios que les ha afectado a los niños, a las maestras y a los papás también porque a veces hay problemas en separación y es más difícil hacer el proceso de recibimiento en las mañanas", dijo Sánchez.
Así como en todo el estado, las medidas de distanciamiento de 6 pies también serán implementadas aquí.
"Cada niño tiene un lugar donde sentarse todo el día, antes podían estar en todo el salon, buscar que juego querían jugar", agregó Gutierrez.
Ahora no se pueden acercar a sus amiguitos y cada uno tiene una caja con juegos.
Y debido a que las reglas de cupo limitado seguirán hasta nuevo aviso, existen interrogantes sobre el futuro de estos servicios para personas que tanto los necesitaban antes de la pandemia.
"Entonces esa va a ser una gran preocupación para los papás que no son trabajadores esenciales y que tienen que regresar a sus trabajos", indicó Sánchez.
Por ahora todavía no se decidido cuando reabrirá el estado pero, de acuerdo a lo que mostraron las directoras, este tipo de sistemas podrían presenter varios cambios.
