Los argumentos finales en el juicio por asesinato de un juez del condado de Orange acusado de matar a tiros a su esposa en la casa de la pareja en Anaheim Hills fueron presentados este miércoles en la tarde.
Jeffrey Ferguson, de 74 años, está acusado de asesinato con agravantes de la pena por disparar un arma que causó la muerte y el uso personal de un arma por la muerte de su esposa Sheryl, de 65 años, el 3 de agosto de 2023. Los jurados comenzarán a deliberar después de los alegatos finales.
Considerarán si el tiroteo fue asesinato en segundo grado u homicidio involuntario, si no lo absuelven.
"Se les ha presentado evidencia - evidencia creíble - de que él sacó el arma, estaba enojado", dijo el fiscal adjunto de distrito Seton Hunt a los jurados el miércoles. "Sacó el arma, le apuntó y la mató".
Hunt dijo que fue una tragedia, pero que Ferguson sigue siendo culpable de asesinato.
Hunt argumentó que el relato más confiable del tiroteo que hizo el hijo del acusado, Phillip Ferguson, fue a la policía justo después de que sucedió. El testimonio de Phillip Ferguson a veces entraba en conflicto con lo que le dijo a la policía en entrevistas separadas, incluida una después de reunirse con un investigador de la defensa.
El fiscal reprodujo una parte de la llamada del hijo al 911 cuando le dijo a un operador que su padre le disparó a su madre después de una discusión que había estado sucediendo "desde la cena".
Sheryl Ferguson salió furiosa del restaurante mexicano El Cholo al que habían ido los tres durante unos 10 minutos después de que el acusado hiciera un gesto con la mano para señalar con un arma durante su disputa. Antes del tiroteo que tuvo lugar más tarde en su casa, Phillip Ferguson dijo que la oyó decir algo como: "¿Por qué no me apuntas con un arma de verdad?".
Hunt reprodujo un vídeo del hijo diciéndole a la policía más tarde: "Me di la vuelta y él sacó un arma, le apuntó y disparó".
Hunt calificó como "ridícula" la defensa de Ferguson, que dijo que creyó haber oído a su mujer decirle que guardara el arma, así que la buscó a tientas mientras intentaba colocarla de forma segura sobre una mesa de café desordenada y, cuando intentó recuperar el control, el arma se disparó.
Phillip Ferguson dijo que las últimas palabras de su madre fueron: "Me disparó", señaló Hunt.
Durante el interrogatorio del fiscal el martes, Ferguson tuvo dificultades para explicar su afirmación de que disparó el arma accidentalmente. Ferguson testificó el lunes que cuando se inclinó sobre una mesa de café para dejar el arma en el suelo, sintió un dolor punzante en su hombro discapacitado, lo que hizo que se cayera y, cuando intentó recuperar el control, el arma se disparó y mató a su esposa.
El martes, bajo un intenso interrogatorio por momentos de Hunt, Ferguson intentó explicar cómo activó sin darse cuenta la Glock que había sacado de la pistolera de su tobillo. Ferguson testificó que vio un espacio abierto en una mesa de café desordenada, a la altura de las rodillas, entre los controles remoto de la televisión, una planta en maceta y libros, donde sintió que podía colocar el arma de manera segura.
Ferguson desenfundó el arma y la sostuvo con la palma hacia arriba y el dedo sobre la corredera, por encima del gatillo, mientras se inclinaba hacia delante desde una posición sentada en un sofá para dejar el arma en el suelo, dijo.
Justo antes del tiroteo, Ferguson dijo que creyó oír a su esposa decirle que guardara el arma, lo que lo confundió inicialmente, pero luego fue a hacerlo para apaciguarla. Dijo que ella hizo su propio gesto de arma con la mano y emitió un sonido de "pa-choo, pa-choo", como el de las balas disparadas.
"Estaba tratando de hacer lo que ella me pidió que hiciera", dijo. "Nunca apunté en su dirección".
Hunt sugirió que Ferguson podría haber subido las escaleras y haber guardado el arma como hacía rutinariamente cada noche antes de irse a la cama.
"Podría haber hecho muchas cosas", dijo Ferguson.
El nivel de alcohol en sangre de Ferguson era de 0,065 por ciento cuando se midió siete horas después del tiroteo, dijo Hunt. Un experto testificó que probablemente era de alrededor de 0,17 por ciento, o casi el doble del límite legal para conducir, en el momento del tiroteo, señaló Hunt.
Cuando el abogado Cameron Talley le preguntó a su cliente el lunes si tenía la intención de disparar a su esposa, Ferguson había respondido: "No, absolutamente no. Fue un accidente".
Talley argumentó que la teoría de la fiscalía es "errónea debido a un malentendido fundamental sobre cómo funcionan las armas".
Talley señaló cómo Hunt se refirió a cargar balas en el arma durante el juicio cuando el arma usa cargadores. Talley también dijo que la trayectoria de la bala como testificó el patólogo en el caso refuta cualquier teoría legal de que el brazo de Ferguson estaba torcido en un ángulo de 45 grados.
"Voy a probar que es inocente", dijo Talley. "Y lo voy a hacer con testigos del gobierno".
Talley señaló el testimonio de un detective sobre qué tan lejos iría el casquillo del proyectil del arma si se disparara de la manera en que la fiscalía teorizó. Pero Talley dijo que se encontró justo al lado de la mesa de café, lo que era consistente con su teoría de un disparo accidental.
Talley también argumentó que el video de vigilancia de la casa también indicó que no hubo fogonazo, lo que también era consistente con un disparo accidental. La bala atravesó el abdomen de la víctima "ligeramente hacia la izquierda" y salió por la parte superior derecha de su espalda, lo que coincidiría con el ángulo en el que el acusado dijo que el arma se disparó, argumentó Talley.
Talley dijo que no hay evidencia de que su cliente estuviera enojado, pero, dijo, estaba tratando de hacer las paces y terminar el conflicto.
"No está enojado", dijo. "¿De dónde viene esta ira de borracho?"
