El martes se hizo otra llamada para reducir el uso de gas pimienta en centros juveniles, después que un nuevo informe reveló usos problemáticos, inapropiados y evitables del producto en los pasillos y campamentos juveniles del Condado de Los Ángeles.
El pedido surgió cuando la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles escuchó un informe de la Oficina del Inspector General del Condado de Los Ángeles que describía momentos horrorosos cuando se usaba el gas pimienta, y las preocupaciones de los oficiales y otro personal, mientras la violencia en los campos juveniles sigue aumentando.
En un caso, una joven con una condición de salud mental se estaba lastimando a sí mismo/a y fue rociada en la ingle y en el trasero, luego la dejaron en una habitación sin agua durante unos 20 minutos antes de ser descontaminada, según el informe.
"Creo que la única solución en esta situación es prohibir el uso de gas pimienta en nuestras instalaciones", dijo el martes a la junta Ricardo García, defensor público del Condado de Los Ángeles. Y agregó: "No veo una alternativa. Ésta no es la primera vez que la junta directiva escucha que se trata de un problema muy real".
La directora de Libertad Condicional Terri McDonald dijo que el uso de gas pimienta ha sido un tema muy desafiante, y que ella ha pedido una revisión de cada video que ha registrado el uso de fuerza en la cárcel juvenil.
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McDonald mencionó que la mayoría de las veces los agentes de libertad condicional fueron encontrados siguiendo las reglas cuando tuvieron que usar gas pimienta.
"El problema eran aquellos cuyas acciones estaban fuera de las normas o las expectativas", dijo.
La funcionaria lo atribuyó a un problema cultural, y dijo que era un pequeño número de oficiales quienes "eligieron el enfoque equivocado".
"Se lo debemos a nuestros jóvenes, a nuestro personal, a nuestras familias, a nuestras comunidades, para mejorar", dijo.
La Supervisora del Condado, Hilda Solís, dijo que le preocupa el daño que se está haciendo a los adolescentes bajo custodia, y señaló que se opone al uso de gas pimienta.
"Creo que es hora de que nos levantemos y digamos eso", dijo. "La evidencia parece ser muy clara".
La Oficina del Inspector General revisó el uso creciente del gas pimienta en las salas y campamentos juveniles después que el Equipo de Investigación NBC4 encontró un aumento del 154 por ciento durante un período de tres años en el uso de este gas.
El Departamento de Libertad Condicional del Condado de Los Ángeles registró 747 usos de gas pimienta en 2017 en pasillos y campamentos juveniles, un aumento del 154 por ciento en comparación con el 2015, cuando el departamento usó el producto 294 veces, según un análisis de NBC4 de los datos del departamento. El centro juvenil registró un salto de 343 por ciento en el mismo período, el mayor número de todas las instalaciones.
Entre las recomendaciones de la Oficina del Inspector General se incluyen: agregar cámaras en todas las instalaciones juveniles, analizar informes más detallados sobre incidentes de gas pimienta, y revisar los materiales de capacitación para eliminar el lenguaje que alienta inadvertidamente la notificación incompleta o inexacta de incidentes.
NBC4 descubrió que los oficiales que supervisan a estos jóvenes están usando gas pimienta, el nivel más alto de fuerza que se usa en las instalaciones del condado, a una tasa más alta que en años pasados, a medida que disminuye la población de adolescentes detenidos.
El gas pimienta, si bien está autorizado para su uso en pasillos y campamentos de Los Ángeles, se considera peligroso para la salud, especialmente para las embarazadas y para los que tienen asma, según la investigación de NBC4.
El aumento se produce después que la supervisión federal por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos terminó en 2015. Y también cuando los departamentos de todo el país lo han rechazado diciendo que incita a la violencia, tiene efectos contrarios a la rehabilitación de los jóvenes, y es una responsabilidad potencial. Y cuando las agencias se están alejando de la encarcelación de menores y prefieren la rehabilitación.
California es uno de los seis estados que permite a oficiales en instalaciones juveniles portar gas pimienta, según el Consejo de Administradores de Correccionales Juveniles. Una propuesta de ley para restringir este gas en el estado fracasó la primavera pasada.
