A partir de este 6 de agosto entra en vigor una nueva ordenanza en la ciudad de Los Ángeles que protege a los inquilinos contra tácticas de acoso y hostigamiento, por parte de propietarios o administradores de viviendas.
Aunque activistas celebran la victoria, están pidiendo que se realicen algunas enmiendas para que la ordenanza sea retroactiva y cubra incidentes ocurridos durante el 2020 cuando muchas personas se vieron afectadas por la pandemia.
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Dionicia Cipres quien se reunió frente a la alcaldía de Los Ángeles para celebrar la nueva ordenanza, cuenta los acosos de los cuales ha sido víctima.
“Me [dieron] un aviso de desalojos de 24 horas, me [corrieron] del edificio, me han querido quitar el estacionamiento y [llegaron] a pegarle a mi esposo”, dijo.
Personas afectadas y grupos que defienden sus derechos aseguran que aunque la ordenanza es buena, falla al no proteger contra incidentes pasados.
“La principal petición es que esta ley se haga retroactiva y que cubra el año 2020 desde que comenzó la pandemia”, dijo Alma Quiñones una residente de los Ángeles que estuvo presente en el evento.
Los activistas también solicitan que se enmiende la ley para que garantice el pago de honorarios de abogados, para que más expertos estén dispuestos a apoyar a residentes con su defensa.
“[Queremos] que el dinero esté disponible para cubrir los costos de los honorarios de los abogados que van a representar a los inquilinos que han sido acosados”, dijo Quiñones.
Los inquilinos que estén siendo acosados en la ciudad de Los Ángeles pueden contactar a la organización Alliance of Californians for Community Empowerment, también conocida como ACCE, para obtener asesoría sobre como defenderse con la nueva ordenanza llamando al (888) 964-8086.
