La tía de un niño de 4 años hospitalizado después de haber sido presuntamente torturado y golpeado por su madre adoptiva dijo el lunes que los parientes del niño están luchando por obtener más información sobre lo que sucedió, y tienen prohibido visitar al menor, señalando que planean demandar al condado de Los Ángeles.
La tía del niño, María Jacinto, habló durante una rueda de prensa esta mañana, junto al abogado Michael Adler.
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"No se merecen esto en absoluto. Ningún niño se merece esto, en ningún caso, bajo el cuidado de nadie", dijo Jacinto. “Solo estamos pidiendo justicia e información”, añadió.
Jacinto parecía estar haciendo referencia tanto al niño hospitalizado, cuyo nombre no ha dado a conocer, y su hermano de 2 años, que, según los informes, también está bajo cuidado de crianza.
Adler alegó que las lesiones del niño fueron causadas por su familia de acogida.
“No tenemos evidencia de que estuviera con alguien más que esta familia adoptiva, y hay pruebas claras de que fue torturado y golpeado que lo han dejado en coma”, dijo Adler a los periodistas.
“Como todo padre de familia, estás horrorizado más allá de lo creíble, porque en primer lugar, uno no entiende cómo sucedió, y dos, ¿por qué haría alguien esto?”, dijo Adler.
Los parientes del niño le dijeron a un medio de comunicación que fueron notificados que el niño fue hospitalizado el 28 o 29 de octubre por alguien que no era del Departamento de Servicios para Niños y Familias.
También dijeron que realizaron la conferencia de prensa con la esperanza de obtener justicia para el niño y más información sobre lo sucedido, la familia según los informes, planea solicitar una investigación.
El Departamento de Servicios para Niños y Familias respondió a una solicitud para obtener detalles básicos diciendo que la confidencialidad protege a los niños y las familias y prohíbe la divulgación de información. El departamento también defendió el proceso de elección de familias de acogida.
“La concesión de licencias a las familias de recursos implica un examen riguroso idoneidad de las familias potenciales para identificar la seguridad, la crianza y el apoyo de hogares para niños en cuidado de crianza”, señaló el comunicado.
“DCFS investiga a fondo las acusaciones de abuso de cuidadores y negligencia y, cuando sea apropiado, trabaja en estrecha colaboración con las fuerzas del orden para garantizar que los niños permanezcan a salvo, y que las denuncias fundamentadas se aborden rápidamente en un tribunal de justicia.
“La ley estatal protege la confidencialidad de los registros de todos los niños y familias que pueden haber llamado la atención de los servicios de protección infantil, y prohíbe confirmar o comentar si un niño o una familia ha sido involucrado con el departamento. Estas leyes existen para proteger confidencialidad de los niños, hermanos y sus familias”, concluyó el comunicado.
