Hasta decenas de hijos y hijas pedían compasión y perdón para sus madres recluidas cuando realizaron una protesta frente al edificio del centro de detención de Lynwood. Solicitaban de las autoridades su liberación ante el peligro de contagio por COVID-19.
Desde el interior de sus vehículos y tocando el claxon para llamar la atención, un numeroso grupo de personas realizaron una marcha a las afueras del Centro de Detención para Mujeres en Lynwood con un propósito humanitario y sanitario a la vez.
“Hay muchas organizaciones que están aquí ahora que son de mujeres que estaban [en la prisión] y están peleando porque ellas saben que no les están dando lo que necesitan”, dijo Arlyn García, una manifestante.
En un día tan especial como el Día de las Madres, muchas de las que tomaron parte en la manifestación se identificaron como madres de hijas encarceladas dentro del penal, y familiares de internas que son madres, preocupadas por la crisis sanitaria que enfrentan actualmente.
“No sabemos si tienen opciones de estar en espacios seguros, la distancia o tener cosas de salud que necesiten”, dijo Melisa Salazar, una manifestante.
De acuerdo a quienes organizaron la marcha, dentro del centro de detención hay por lo menos seis casos de contagio confirmado y al menos unas 166 internas que han sido puestas en cuarentena.
“Estoy aquí para apoyar a todas las madres, las abuelas, y las hermanas que están encarceladas especialmente en el Día de las Madres”, dijo Salazar.
Local
Quienes piden la liberación de algunas internas aseguran que será solo mientras pasa el peligro de la pandemia, y están dispuestos a aceptar las condiciones que las autoridades puedan imponer.
“Que sigan luchando, porque también nosotros estamos luchando por ellas”, dijo García.
Por el momento solo queda seguir exigiendo por medio de manifestaciones y marchas a sus demandas, con la esperanza de que las autoridades correspondientes puedan escuchar y tomar acciones.
Los organizadores de esta protesta son siete organizaciones civiles de Los Ángeles, los cuales aseguraron que seguirán trabajando para lograr que algunas de las reclusas sean liberadas ante el temor de más contagios.
