El concejal del distrito 9 de Los Ángeles, Curren Price anunció una ayuda económica adicional para los afectados por la explosión provocada por el Departamento de Policía de Los Ángeles de la división de explosivos.
El incidente ocurrió el pasado 30 de junio dañó más de 40 vehículos, 25 propiedades y 17 personas resultaron heridas.
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Con paso lento, pero seguro, el concejal Price esta tarde visitó a los residentes afectados por la explosión del en el sur de la ciudad para darles la buena noticia.
“Tenemos dinero para asistir los servicios que requiere el área y las reparaciones en las propiedades y cualquier otra estructura”, dijo Price.
Una de las residentes afectadas fue Martha Guerrero, quien se alegró un poco al ver que las ventanas que le hacían falta y que estaban rotas desde el día de la explosión, agregando que ha recibido apoyo de la ciudad.
“La pintaron [la casa] y le pusieron las ventanas de arriba que se habían quebrado, otras ventanas más que se dañaron ese día”, señaló Guerrero.
Más de $1 millón se destinará para seguir pagando la vivienda 15 familias que fueron desplazados desde el mes de junio, mientras que $1,175,000 se destinarían a las reparaciones de las propiedades dañadas y $948,000 a los gastos operativos de un centro de recuperación del vecindario.
“Queremos estar seguros de que las familias que han sido desplazadas tengan todo lo que necesitan y estamos trabajando con ellos para que regresen a sus hogares, aunque hay algunos que ya no quieren regresar al área”, señaló Price.
La explosión, del verano pasado, ocurrió después de que LAPD confiscó una gran cantidad de fuegos artificiales ilegales en una vivienda del lugar y algo salió mal al tratar de destruir lo confiscado, ya que se generó una gran explosión que destruyo el vehículo táctico de la policía así como otros 40 autos y 35 propiedades. Diecisiete personas también resultaron heridas.
“[La ayuda monetaria] es algo bueno, por lo menos no nos abandonaron, que bueno que están tomando cartas en el asunto de arreglar lo que se dañó”, dijo María Aguirre, residente del área.
Por el momento unas seis propiedades continúan siendo reparadas, y más de una decena de personas que fueron afectadas por la explosión están recibiendo asistencia médica y psicológica. Los $5 millones en ayuda son parte de los fondos con los que cuenta la ciudad para resolver y pagar los reclamos monetarios de varios negocios y dueños de vivienda
