Con el ritmo de las vacunas contra el COVID-19 disminuyendo en el condado de Los Ángeles, la directora de salud pública dijo el lunes que podría tomar un poco más de lo previsto originalmente para que la región alcance un punto de la denominada inmunidad colectiva.
Al principio del esfuerzo de vacunación, los funcionarios de salud habían estimado la mayor parte de la población del condado estaría inoculada a finales de junio.
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En declaraciones a los periodistas el lunes, la directora de Salud Pública, Bárbara Ferrer, dijo que el condado ahora predice un punto de “inmunidad comunitaria” a mediados o finales de julio.
“Actualmente estamos inoculando alrededor de 400,000 de los residentes en el condado de Los Ángeles cada semana, y probablemente necesitaremos 2 millones más con la primera dosis hasta que el 80% de todos los (residentes) del condado de Los Ángeles de 16 años o más haya recibido al menos una vacuna”, dijo.
“Al ritmo que vamos, esperamos que podamos alcanzar este nivel en algún momento a mediados o finales de julio. Pero eso asumiendo que sigamos teniendo al menos 400,000 personas vacunadas cada semana. Eso incluiría tanto lo primera dosis que necesita la gente, como su segunda dosis”.
Ferrer ha observado una caída significativa en la demanda de vacunas en las últimas semanas, con el condado avanzando más allá del aumento inicial de residentes ansiosos por conseguir las inyecciones. Los esfuerzos ahora se están enfocando en las comunidades más difíciles de alcanzar, con la esperanza que la expansión de clínicas móviles lleguen a las poblaciones que han retrasado en los esfuerzos de vacunación, ya sea por indecisos por recibir la vacuna o la imposibilidad de llegar fácilmente a un lugar de vacunación.
El concepto de inmunidad comunitaria o colectiva, en el que suficientes personas estén vacunadas para ralentizar significativamente la propagación del virus, sigue siendo un objetivo indefinido.
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Ferrer señaló nuevamente el lunes que aún no está claro exactamente qué porcentaje de residentes necesitarían ser vacunados para que sean incluidos en ese grupo de inmunidad, pero dijo que la suposición sigue siendo de alrededor del 80%.
Sin embargo, alcanzar ese nivel requerirá mejoras en los casos de vacunación entre comunidades selectas. Según las cifras proporcionadas el lunes, solo el 38% de los residentes negros en el condado han recibido al menos una dosis de la vacuna, y el 42% de los residentes latinx. Eso se compara con el 60% de los residentes blancos, y el 68% de los asiáticos.
Al observar las cifras por edad, los residentes mayores, que han sido elegibles para vacunas por mucho más tiempo: tienen las mejores tarifas, con el 86% de los residentes de 65 a 79 años que reciben al menos una inyección, y el 73% de los de 80 años en adelante.
Pero entre los residentes elegibles más jóvenes, aquellos entre las edades de 16 y 17 años, la tasa es solo del 34%, junto con el 45% de los residentes de 18 a 29 años, el 54% de los de 30 a 49 años, y el 65% de los residentes de 50 a 64 años.
Ferrer dijo que hay 755 sitios en el condado que actualmente ofrecen la vacuna contra el COVID-19, y señaló que todos los sitios del condado y de la ciudad de Los Ángeles, junto con muchos sitios móviles y comunitarios, no requieren citas anticipadas para que la gente se vacune.
“Queremos que sea muy fácil de obtener una vacuna si viven en estas comunidades”, dijo.
Ferrer dijo que el condado establecerá un portal web el lunes que permitirá que las personas hagan arreglos para que un equipo móvil de vacunas visite lugares de trabajo específicos.
El lunes por la tarde, la Administración de Drogas y Alimentos de EEUU autorizó el uso de la vacuna Pfizer para residentes de 12 a 15 años, ampliando aún más el grupo de personas elegibles para las vacunas. Ferrer estimó que hay unos 500,000 personas del condado en ese grupo de edad.
En general, hasta el viernes, se han administrado casi 8.5 millones de la vacuna en el condado: más de 5.1 millones primeras dosis y más de 3.3 millones segundas dosis.
El condado anunció solo cuatro nuevas muertes por COVID-19 el lunes, aunque los números tienden a ser más bajos los lunes debido a los retrasos en los informes del fin de semana.
Sin embargo, las muertes elevaron el número de muertos del condado a 24,000, alcanzando 24,003.
Otros 179 casos fueron confirmados por el condado, elevando el total durante toda la pandemia a 1,235,797.
Según cifras estatales, hubo 374 personas hospitalizadas debido a COVID-19 en el condado de Los Ángeles a partir del lunes, con 79 personas en cuidados intensivos.
Ferrer dijo la semana pasada que el número promedio de hospitalizaciones diarias del condado cayó a un nivel no visto desde que se declaró la pandemia en marzo de 2020.
