Trabajadores y administradores del centro de jornaleros ubicado en el centro de Los Ángeles llevaron a cabo este viernes una jornada de manifestación para pedir un alto al desalojo del local.
El local, en la intersección de la Avenida Union y el Bulevar Wilshire, ha servido de centro de reunión de jornaleros durante más de una década. Allí, los trabajadores reciben apoyo en cuestiones laborales, especialmente sobre el pago de salarios. Para algunos, el centro se ha convertido en su segundo hogar.
Local
La orden de desalojo llegó el pasado mes de diciembre, cuando la compañía Wilshire Unión, dueños de la propiedad, envió una carta a CARECEN, la organización a cargo del lugar.
En la misiva, la empresa calificó de criminales a los jornaleros y alega que el centro se ha convertido en una molestia, ya que supuestamente orinan en público y consumen bebidas alcohólicas. Sin embargo, CARECEN resalta que solo están criminalizando a los trabajadores.
Ellos aseguran tener pruebas con fotos y videos de la supuesta mala conducta de las personas que llegan al centro de jornaleros.
Los jornaleros aseguran que no se piensan ir y que, si cierran este centro, regresarán a esta intersección porque saben que la comunidad necesita de su trabajo.
Por los momentos, CARECEN y los jornaleros han comenzado una campaña de petición de firmas, a la que se puede ingresar en línea o en persona en el centro de jornaleros.
