El primer complejo habitacional en el estado de California para estudiantes indigentes de un colegio comunitario fue inaugurado el jueves en Norwalk.
Actualmente hay cinco estudiantes viviendo en el complejo, y funcionarios han dejado una recámara vacía en caso de que alguien se contagie con COVID-19, y necesite aislarse. Una vez que pase la pandemia habrá lugar para decenas de jóvenes.
Jéssica Jiménez, orgullosamente mostró lo que por ahora es su casa, anteriormente ella era una estudiante indigente del colegio Cerritos.
Ahora Jimenez vive en “The Village” donde esta mañana representantes del colegio, Jóvenes Inc., y otras organizaciones cortaron el listón del nuevo complejo de apartamentos.
“[Es] 100 por ciento para estudiantes que no tienen hogar”, dijo José Fierro, presidente del colegio Cerritos.
Según una encuesta del colegio, el 15% de sus estudiantes experimentaron algún tipo de indigencia o problema de alojamiento el año pasado, y ésta es la primera unidad habitacional en el estado para jóvenes de entre 18 y 25 años de edad, y se localiza a menos de media milla del colegio comunitario de Cerritos.
“Algunas de estás unidades tienen hasta tres recámaras, y todas juntas hospedará a un total de 28 estudiantes”, señaló Fierro.
Local
The Village costó aproximadamente 4 millones de dólares y se pagó con fondos generales del colegio, pero con una colaboración con el condado y varias organizaciones, entre ellas Jóvenes Inc., quien se encargará de pagar la renta al colegio, del mantenimiento y de controlar el hospedaje, que será gratis para algunos y muy bajo para otros.
“Hacer una inversión ahorita en la vida de los jóvenes puede darles la oportunidad de no estar desamparados el día de mañana”, dijo Andrea Marchetti, Director Ejecutivo de Jóvenes Inc.
Para los estudiantes, el hospedaje ha sido una bendición que ha cambiado sus vidas, al eliminar la incertidumbre y tristeza de no tener un hogar.
“Que no les dé pena, a veces escondemos la necesidad, y por esconder la necesidad, no nos pueden ayudar”, comentó Anthony Miller, estudiante que estaba desamparado.
Miller dijo que sus calificaciones han mejorado y sigue jugando fútbol americano, y lo más importante, es que ahora ya no tiene que dormir en un parque porque ya cuenta con un techo, gracias a The Village.
Si usted conoce a algún estudiante que está atravesando por momentos difíciles, envíe un correo electrónico a cerritospn@jovenesinc.org o llame a al colegio de Cerritos.
