A Chris Clark le robaron su Range Rover la madrugada del sábado en un estacionamiento de Marina del Rey.
"Me enojé", dijo. "Y todo el sábado, solo me sentí molesto".
Sabía que su vehículo iba a alguna parte. Accidentalmente dejó un juego extra de llaves en su bolsa de golf en el asiento trasero y el ladrón usó el botón para arrancar el auto.
Presentó un informe con LAPD y luego contactó al Centro de Control de Land Rover, que usa GPS para encontrar las coordenadas.
"Lo descubrió justo ahí abajo en la calle y estaba directamente sobre la frontera en Tijuana", dijo.
Clark solicitó la ayuda de amigos y contactos en México y contrató a una empresa de recuperación de autos que rastreó su automóvil.
"Lo siguiente que sé es que comienza a enviarme fotos y videos", dijo. "Lo detuvieron y amenazaron con arrestarlo en México".
Local
Los hombres de la compañía de recuperación de autos le enviaron un video del sospechoso llevándolos dentro de la casa de un miembro de la familia para obtener las llaves.
"Si hubiera esperado a que alguien más lo hiciera, habría sido cortado", dijo. "O vendido a alguien más".
