LOS ÁNGELES (California) - Autoridades federales advierte que están surgiendo casos en que familiares con menores detenidos en centros migratorios son víctimas de personas sin escrúpulos.
Se trata de una estafa en la que dichos familiares reciben llamadas telefónicas, en las que criminales se hacen pasar por representantes del gobierno y les piden miles de dólares para pagar trámites de los menores.
Esta nueva forma de estafa está siendo reportada en su mayoria por los consulados centroamericanos.
El gobierno no hace llamadas a familiares pidiendo dinero, normalmente ese proceso está hecho en oficinas y son los trabajadores sociales los que se contactan con las familias de los menores.
Se pide que todo familiar de un menor detenido por las autoridades migratorias siempre verifique la legitimidad de la llamada, tomando en cuenta que nunca le van a pedir hacer pagos por el transporte de los menores.
Si es víctima de fraude haga la denuncia a las autoridades federales presionando aquí.
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