Una familia del sur de California piensa que el calor podría haber provocado la muerte de un anciano en Norwalk durante la ola de calor del pasado fin de semana.
El caso no ha sido confirmado por la oficina forense pero el abuelo falleció cuando estaba al aire libre, en medio de temperaturas de 110 grados.
El hallazgo del cuerpo lo hizo una vecina, Laura Romero, como a las 4 de la tarde y las autoridades piensan que estuvo en el patio por varias horas. Una hija de Tapia había llamado a Romero que chequeara como estaba su padre, Frank Tapia, de 95 años.
Al hombre conocido por sus vecinos de Norwalk como el abuelo Frank no le gustaba encender el aire acondicionado, ni siquiera durante las horas de calor. Solo abría las puertas, de acuerdo con la vecina Laura Romero.
La hija de Tapia, Gloria Tarrier, espera que la gente entienda que una ola de calor puede ser peligrosa para los ancianos y los niños.
Es por ello que el Departamento del Alguacil en Norwalk advierte a los residentes que tengan más cuidado con las personas de mayor edad y los más pequeños durante épocas de altas temperaturas.
