La Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles votó el martes para ampliar el acceso a la atención médica para los residentes que no califican bajo la Ley de Atención Asequible, principalmente inmigrantes indocumentados.
My Health LA es una asociación entre el condado y las clínicas comunitarias locales y los centros de salud destinados a brindar atención médica a todos los residentes del condado. Las clínicas brindan servicios de atención primaria como exámenes de detección, exámenes físicos, manejo de enfermedades crónicas y medicamentos recetados.
El Departamento de Servicios de Salud ofrece atención especializada y servicios más agudos. Más de 150,000 residentes obtienen servicios bajo el programa de forma gratuita o a bajo costo.
La supervisora Hilda Solís elogió el programa como "uno de los muy pocos en toda la nación que existe que brinda este tipo de servicio".
Los términos de la asociación entre el condado y los proveedores de atención médica se han negociado recientemente bajo contratos que la supervisora Sheila Kuehl dijo que permitirían a My Health LA inscribir a más residentes, expandirse a más clínicas en los próximos meses y garantizar un acceso más oportuno a la atención.
Bajo los nuevos términos, los pacientes deben podrían obtener una cita para atención de rutina en un lapso de 21 días. Algunos ahora esperan hasta tres meses para una visita. La atención primaria de urgencia deberá estar disponible dentro de las 96 horas.
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Kuehl y la supervisora Kathryn Barger recomendaron que el condado también busque ampliar el acceso al tratamiento de abuso de sustancias y la atención de salud mental para los pacientes de My Health LA.
El tratamiento gratuito para el abuso de sustancias está disponible en el plan, pero está infrautilizado, por lo que los supervisores ordenaron a los empleados que exploren por qué eso es cierto.
Las opciones son limitadas para el tratamiento de problemas de salud mental menos graves, pero prevalentes, como la depresión y la ansiedad, y la junta también dirigió a los empleados a buscar fuentes de financiamiento para ampliar el tratamiento disponible.
“Muchos de los que no tienen seguro médico pueden tener miedo de aprovecharse, para decir que incluso tienen ese problema, dado lo que está haciendo el gobierno federal al examinar a nuestra gente indocumentada”, dijo Kuehl. “(Y) si involuntariamente estamos creando barreras para los miembros que desean acceder a servicios de sustancias y tratamientos, debemos comprender cómo se crean las barreras”.
La administración del Centro Infantil y Familiar de St. John's Well afirma que es el mayor proveedor de servicios de salud para inmigrantes indocumentados en los Estados Unidos y brinda servicios a más de 25,000 residentes del condado en el programa My Health LA.
"Este programa se necesita desesperadamente", dijo a la junta el presidente y gerente general de St. John's, Jim Mangia. “Este es un momento en que necesitamos expandir los servicios de salud para inmigrantes. Nuestras comunidades están bajo ataque”.
Mangia agradeció a la junta directiva y al Supervisor Mark Ridley-Thomas en particular por ayudar a lograr un compromiso de trabajo, pero dijo que todavía le gustaría ver que el condado haga más, incluida la atención ampliada de la diabetes.
La votación de la junta a favor de los nuevos contratos y en apoyo de la moción de Kuehl y Barger fue unánime.
