Dos exdetectives de la policía del área de Los Ángeles fueron acusados de dispararle a un hombre desarmado en 2020 y dejarlo paralizado de cintura para abajo, dijo el miércoles el fiscal de distrito.
Los exdetectives de Whittier, Cynthia López y Salvador Murillo, abrieron fuego el 30 de abril de 2020, cuando Nicholas Carrillo huía de ellos. Dos balas lo alcanzaron en la espalda, una le cortó la médula espinal, mientras trepaba una cerca para escapar.
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“Aunque tuvo suerte de sobrevivir, su vida cambió para siempre y ahora debe comenzar a usar una silla de ruedas”, dijo el miércoles el fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, George Gascón, durante una conferencia de prensa.
Murillo está acusado de dos cargos de asalto con un arma de fuego semiautomática y dos cargos de asalto bajo pretexto de autoridad. López enfrenta dos cargos de asalto bajo pretexto de autoridad, un cargo de disparar contra un vehículo ocupado y un cargo de asalto con un arma de fuego semiautomática. Los fiscales presentaron los cargos el martes.
Los detectives estaban vestidos de civil y en un automóvil sin identificación cuando vieron un sedán que supuestamente había sido usado durante un robo sin armas el mes anterior, dijo Gascón. Una mujer fue la sospechosa de ese robo en un Walmart, donde sustrajeron un televisor. Carrillo estaba solo en el auto el día que le dispararon.
Los detectives siguieron al sedán hasta un callejón y salieron de su vehículo con las armas en la mano. El sedán dio marcha atrás y chocó con el auto de los detectives, dijo Gascón.
López disparó contra el parabrisas trasero del sedán, dijeron los fiscales. Carrillo salió corriendo del auto y López y Murillo abrieron fuego mientras lo perseguían. No estaba armado.
Se espera que sean procesados el lunes. No quedó claro de inmediato si tenían abogados que pudieran hablar en su nombre.
La Asociación de Oficiales de Policía de Whittier, el sindicato que representa a los oficiales de base del departamento, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios el miércoles.
Los detectives ya no son empleados del Departamento de Policía de Whittier, que tampoco respondió a una solicitud de comentarios. Whittier está a unas 15 millas (24 kilómetros) al sureste del centro de Los Ángeles.
El caso de Whittier se produce dos semanas después de que la oficina de Gascón acusó a siete oficiales de la Patrulla de Caminos de California y a una enfermera de homicidio involuntario por la muerte en 2020 de un hombre que gritaba “No puedo respirar” mientras varios oficiales lo sujetaban mientras intentaban tomar una muestra de sangre.
