Cuatro hombres que alegaron que fueron abusados sexualmente cuando eran adolescentes por un exentrenador de baloncesto del área de Santa Clarita llegaron a un acuerdo con el Distrito de Escuelas Secundarias William S. Hart Union.
Los demandantes se identifican únicamente como John Doe 1, 2, 3 y 4 en la demanda consolidada del Tribunal Superior de Chatsworth, que originalmente se presentó en demandas separadas en 2019 y 2020 contra el distrito y Jeremy Haggerty, exentrenador asistente del equipo en Canyon High School.
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Los abogados de los demandantes notificaron el miércoles acuerdo con el juez Melvin D. Sandvig. No se divulgaron los términos.
En sus documentos judiciales, los abogados defensores declararon que la administración de la escuela del distrito no tenía un "aviso constructivo de que Haggerty tenía la propensión a abusar (sexualmente) de menores".
Los abogados defensores también sostuvieron que los demandantes no discutieron las supuestas acciones de Haggerty con nadie hasta 2018, años después de graduarse.
Señalaron que durante el empleo de Haggerty en Canyon High School, nadie se quejó de que tocara a los estudiantes de manera inapropiada.
Haggerty, ahora de 38 años, fue sentenciado en el Tribunal Superior de Los Ángeles en julio de 2019 a nueve años de prisión por agredir sexualmente a nueve adolescentes que jugaban o tenían sesiones de entrenamiento privadas con él. No se declaró culpable en mayo de 2019 de seis cargos de actos lascivos con un niño y tres cargos de agresión sexual, todos delitos graves.
Los demandantes alegaron que el entrenador en jefe de Canyon High y un asistente sabía que Haggerty pasaba tiempo a solas con los jugadores en la sala sin supervisión.
Alegan que el entrenador en jefe también sabía que Haggerty tenía una condena previa por agresión a un oficial de policía, pero nunca se lo dijo a los jugadores ni a sus padres.
DETALLES DE LA AGRESIÓN EN LA DEMANDA
Todos los demandantes ahora tienen entre 20 y 30 años. Doe 1 alega que Haggerty lo tocó inapropiadamente durante el primer, segundo y tercer año en la preparatoria Canyon High School.
Dijo que le hacía masajes bajo la apariencia de fisioterapia y entrenamiento. Haggerty fue despedido durante el último año de Doe 1, según la demanda.
Doe 2 conoció a Haggerty cuando el demandante estaba en octavo grado. Los padres de Doe 2 le permitieron entrenar con él porque había jugado anteriormente para el entonces entrenador en jefe de Canyon High School, Chad Phillips.
La pareja esperaba que Haggerty mejorara las posibilidades de su hijo de jugar baloncesto universitario en Canyon High, según la demanda.
Después de que Doe 2 se convirtió en estudiante de primer año en Canyon High, Haggerty supuestamente comenzó a tener conversaciones de orientación sexual con él.
Haggerty agredió sexualmente a Doe 2 en la sala de entrenadores de Canyon High tocándolo inapropiadamente y también masajeó al adolescente después de los entrenamientos en el gimnasio de la escuela secundaria, según la demanda.
Haggerty también abusó sexualmente del adolescente en la casa del entrenador, convenciendo al adolescente de que necesitaba "mantenimiento corporal", alega la demanda. Después de que los conserjes se quejaron de que Haggerty estaba en el gimnasio con los estudiantes por la noche, le quitaron la llave al entrenador, según la demanda.
John Doe 3 conoció a Haggerty el verano anterior a su primer año en Canyon High School durante los campamentos, según la demanda.
Haggerty agredió sexualmente a Doe 3 en la casa del entrenador y le dijo al adolescente que tenía experiencia en educación sexual, alega la demanda.
John Doe 4 conoció a Haggerty en su primer año en Canyon High y también sostiene que Haggerty lo sometió a "mantenimiento corporal" después de los entrenamientos y que el entrenador lo tocó de manera inapropiada y lo sometió a conversaciones inapropiadas dada la edad del demandante en ese momento.
Haggerty, quien también era el entrenador atlético del equipo, también abusó de Doe 4 y otros jugadores tocándolos de manera inapropiada mientras vendaba extremidades adoloridas después de los entrenamientos, alega la demanda.
