La llegada de dos desde direcciones opuestas en el sur de California esta semana podrían ocasionar flujos de escombros e inundaciones repentinas en las áreas afectadas por los incendios, anunció este lunes el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).
Se espera que las tormentas sobrantes de la ahora tormenta tropical Rosa produzcan nubes sobre Los Ángeles, pero solo había una posibilidad de que traiga lluvias cuantificables al área la noche del lunes, dijo Keily Delerme, meteoróloga del NWS.
También se espera que un sistema de baja presión que se desplaza desde el Océano Pacífico deje entre 1/4 a una pulgada de lluvia de martes a miércoles en el área de Los Ángeles, y posiblemente más lluvia en las montañas si se desarrollan tormentas eléctricas, dijo Delerme.
El mayor impacto del sistema del Pacífico podría sentirse en áreas donde los incendios forestales ardieron durante el verano, dijo. Podrían ocasionar deslizamientos de lodo o flujos de escombros.
Y el clima inestable ha traído un aviso de oleaje alto a las playas del área de Los Ángeles hasta el martes por la mañana con olas de seis a 10 pies.
Cómo prepararse para una emergencia
El capitán de la Autoridad de Bomberos del Condado de Orange (OCFA), Steve Concialdi, dijo que su agencia se estaba preparando para fuertes lluvias en Upper Trabuco Canyon y Holy Jim Canyon, que ardieron hace dos meses.
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Las autoridades también tenían planes de contingencia preparados para el flujo de escombros o deslaves de lodo en los escarpados cañones al este de Irvine, con operadores de equipos pesados y equipos de mano disponibles si es necesario.
Concialdi dijo que todas las estaciones de bomberos en el Condado de Orange tienen sacos de arena, que están disponibles para los residentes. Pero no todos tienen arena para poner en ellos.
Las posibles tormentas serían el primer evento de lluvia de la temporada, dijo Delerme. Pero no traerán una ráfaga de aire frío. Se espera que las temperaturas bajen a los 70 el martes y el miércoles hacia el interior y los 60 a lo largo de la costa con un calentamiento de regreso a los 80 para el viernes hacia el interior y 70 a lo largo de la costa. Las temperaturas deberían continuar cálidas el próximo fin de semana.
Es muy temprano para decir si será un invierno húmedo, dijo Delerme. Los meteorólogos están atentos a un débil El Niño, que podría aumentar o disminuir las probabilidades de lluvia.
