Jessica Biel y su restaurante West Hollywood, Au Fudge, fueron demandados por trabajadores que alegan que se les deben propinas, así como dinero de horas extras y por no tomar su hora de comida o de descanso.
"Muchos de ellos trabajaron como camareros y de servicio en Au Fudge como una forma de sobrevivir mientras trataban de comenzar una carrera en el negocio del entretenimiento", dijo el tribunal superior de Los Ángeles sobre la demanda realizada por Christina Desage y otros ocho demandantes.
Los demandantes buscan daños compensatorios no especificados y por lo menos $1 millón en daños punitivos.
Jon Rollo, uno de los copropietarios de Au Fudge junto con Biel y varios otros individuos, se negó a comentar.
Au Fudge abrió en marzo de 2016 y los demandantes, que incluyen un anfitrión, un servidor, un corredor de comida, una barista y un barman, estuvieron entre los primeros contratados, de acuerdo con el pleito.
Adjunto a la demanda se encuentra un artículo de revista que muestra a la joven de 35 años de edad, con el titular, "El nuevo restaurante Au Fudge de Jessica Biel se abre y es el sueño de una chica francesa".
El restaurante cuenta con un menú Cal-francés y una sala de juegos para niños supervisados.
