Un hombre estaba bajo custodia este miércoles tras su arresto por presuntamente matar a un paciente en el Hospital Antelope Valley en Lancaster, donde ambos hombres estaban siendo tratados por COVID-19, dijeron las autoridades.
Jesse Martínez, de 37 años, fue fichado bajo sospecha de asesinato y su fianza se fijó en $ 1 millón, según el Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles.
Martínez ha sido acusado de asesinato, con el agravante de delitos de odio y abuso de ancianos, según el departamento del alguacil, que informó que debera comparecer ante el Tribunal de Antelope Valley el lunes.
El crimen ocurrió el 17 de diciembre, alrededor de las 9:45 a.m., en las instalaciones, donde ambos hombres estaban siendo tratados por COVID-19, informó el departamento del alguacil.
“(La víctima) estaba alojada en una habitación para dos personas dentro del hospital con el sospechoso, que también estaba allí recibiendo tratamiento”, según un comunicado del departamento del alguacil. “El sospechoso se molestó cuando la víctima comenzó a rezar. Luego golpeó a la víctima con un tanque de oxígeno”.
El nombre de la víctima de 82 años, quien falleció al día siguiente, no ha sido revelado, pendiente de notificación a sus familiares.
La víctima y el sospechoso se conocían, informó el departamento del alguacil.
