La Arquidiócesis de Los Ángeles anunció el viernes la dispensación de la obligación de asistir a misa los domingos los próximos fines de semanas para evitar la propagación del mortal virus.
“Dados los peligros e incertidumbres, después de la oración y la reflexión, y en consulta con mis hermanos obispos, sacerdotes y consejeros laicos, he autorizado ciertas precauciones y adaptaciones relacionadas con la celebración de la Eucaristía en nuestras parroquias”, dijo José H. Gómez, arzobispo de la Arquidiócesis de Los Ángeles, que incluye los condados de Los Ángeles, Ventura y Santa Bárbara.
De acuerdo a Gómez, la nueva regla temporal incluye dispensación de la obligación de asistir a misa los fines de semana del 14 al 15 de marzo, del 21 al 22 de marzo y del 28 al 29 de marzo.
“Estas medidas tienen la intención de disminuir el riesgo de poner en peligro a nuestra gente o propagar esta enfermedad durante nuestra adoración”, agregó el arzobispo.
Las nuevas medidas incluyen: limitar la asistencia a la misa a 250 personas de acuerdo con las recomendaciones estatales de salud pública, acomodaciones para el "distanciamiento social" recomendado en la misa, y la cancelación o suspensión de cualquier cosa que no sea esencial para la celebración de la fe católica, como los retiros, servicios de penitencia, reuniones de padres, grupos juveniles y grupos de oración.
"Animo a aquellos de ustedes que no pueden venir a misa, quedarse en casa y leer los Evangelios, rezar con sus familias y unirse al sacrificio de la misa haciendo un acto de comunión espiritual", escribió el arzobispo Gómez en una carta dirigida a los fieles.
“Oremos por aquellos que están enfermos y aquellos que ya han perdido seres queridos a causa de este virus. Que Dios los consuele y les conceda paz ”, concluyó el Arzobispo en su carta sobre el coronavirus.
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Para obtener más información y recursos sobre cómo limitar el impacto del coronavirus puede visitar la página de internet de preparación para emergencias de la Arquidiócesis, lacatholics.org/emergency.
