Una comunidad de repatriados en Ciudad de México

En “El Pequeño Los Ángeles” conviven quienes fueron deportados de Estados Unidos.

Una comunidad de repatriados en el corazón de ciudad de México

“El Pequeño Los Ángeles” es un área donde conviven quienes fueron deportados de Estados Unidos.

En un barrio ubicado en el corazón de la ciudad de México, es cada vez más común escuchar conversaciones en inglés.

Es una pequeña zona conocida como Little LA o el Pequeño Los Ángeles, una comunidad de ciudadanos mexicanos que han sido deportados de distintas partes de Estados Unidos. Como la mayoría de los han regresado en forma forzosa, llegaron al país del norte cuando eran niños, hasta que fueron expulsados. 

"La vida en Little LA es muy amigable, very friendly", dice Christian, quien fue repatriado hace algunos meses tras ser detenido por conducir sin licencia y no tener documentos legales. 

La mayoría de los deportados llegan a México sin destino, ya que muchos de ellos no conocen el país en el que nacieron. Desconocen dónde vivirán o como se ganaran la vida. 

"Tratas de conseguir trabajo y te discriminan, te ven y te dicen: no es que, tienes tatuajes", dice Christian, recordando su experiencia de recién llegado. 

Sin embargo, con el tiempo Christian ha logrado adaptarse. 

"Estar alrededor de gente de situaciones similares, te hace sentir un poco más cómodo, y aceptas esta situación más, y no te pega tan duro", dice Christian. 

La mayoría trabaja en un centro de llamadas en donde aprovechan su conocimiento del inglés. La comunidad se ha desarrollado alrededor de este lugar, ubicado frente al Monumento de la Revolución. 

“Así empezó todo, por la industria de los ‘call centers’, y de repente, ya las personas binacionales se empezaron a congregar, trabajar, estudiar, han abierto sus propios negocios, hay un albergue para migrantes y nuestra asociación civil", dice Israel Conchas, fundador de New Comienzos, quien calcula que hay más de mil inmigrantes retornados que se encuentran en esa área. 

Pero, aunque viven lejos de la tierra que los vio crecer, no extrañan la comida que dejaron atrás, ya que cuentan con restaurantes que venden desde hamburguesas hasta burritos estilo California o Texas. 

Así es como cientos de repatriados encuentran una nueva oportunidad para echar raíces o sobrevivir mientras esperan una oportunidad de regresar al país que los vio crecer.

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