Llora al recibir castigo por matar a 6 personas al conducir ebria

"Me hago responsable por todo lo ocurrido”, dijo Olivia Culbreath.

Una joven que desencadenó un aparatoso accidente que cobró la vida de seis personas al conducir en sentido contrario en dos autopistas fue sentenciada el miércoles en la Corte Superior de Los Ángeles.

La madre de la sentenciada le dijo al juez que desde el mortal accidente, su hija se ha dedicado a ayudar a otros reos en la cárcel, y señaló que la tragedia ha afectado emocionalmente al hijo de cuatro años de la joven.

“Me hago responsable por todo lo ocurrido”, dijo Olivia Culbreath, de 26 años de edad, antes de ser sentenciada por la juez de la Corte Superior de Los Ángeles a 30 años en prisión a cadena perpetua.

Fue el 9 de febrero de 2014 cuando Culbreath que iba acompañada por su hermana y amiga manejó en sentido contrario por las autopistas 57 y 60 a la altura de Diamond Bar, provocando la muerte de seis personas.

Mary Mejia, la única sobreviviente de una de las familias afectadas dio su testimonio antes de la sentencia y relató que el haber perdido a su madre, padre, hermana y abuelita le ha dejado con el corazón partido.

Kristin Young y la hermana de Culbreath también murieron en el percance, luego de que la sentenciada condujera al menos ocho millas en sentido contrario por las autopistas 57 y 60, y casi con el doble del nivel de alcohol permitido en la sangre.

“Le pido a Dios todos los días que le de consuelo a todos aquellos que lastimé por mis acciones”, dijo la sentenciada a los familiares de las víctimas.

La joven se dirigió a los familiares y les pidió perdón al igual que a su hijo. Culbreath llegó a un acuerdo con la fiscalía en mayo para evitar de ser enjuiciada, ya que solo tenía 21 años cuando ocurrió el mortal accidente.

Al cumplir 25 años en prisión podría solicitar una audiencia para ser liberada bajo libertad condicional.

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