Proyecto ofrece justicia para los inocentes

Estudiantes de leyes ayuda a los juzgados y sentenciados en forma errónea.

María Méndez pasó once años en prisión después de haber sido sentenciada de 25 años a cadena perpetua por un delito que no cometió.

Una década después, un grupo de estudiantes llegaron hasta su celda para lograr lo que parecía imposible: su libertad.

"Ahora que despierto, miro el rayo del sol que me está enfocando por la ventana”, dice Méndez, desde su casa en Cozumel, Quintana Roo. “Es algo lindo que le doy gracias a Dios y gracias a mis abogadas".

María se refiere al grupo de estudiantes de la Escuela de Leyes, en el centro de Los Ángeles, a quienes su universidad les permite defender a aquellos que, por distintos motivos, se les juzgó de manera errónea y purgan sentencias inmerecidas.

Los jóvenes pertenecen al proyecto “Justicia para los Inocentes”, el cual atrae a cientos de estudiantes de derecho desde 2011.

"Para mi es una satisfacción enorme saber que el primer caso que yo trabajé en este proyecto resultó siendo de gran logro porque la señora se encuentra ahora libre", cuenta Claudia Garcia Salas, una de las integrantes del proyecto.

De acuerdo con el director del programa, Adam Grant, el proyecto inspira a los estudiantes a usar sus capacidades al ayudar a alguien que necesita desesperadamente de su asistencia.

Los estudiantes aplican lo que aprenden sobre ley criminal que incluye leer reportes, investigación, búsqueda de evidencias, entre otros elementos que necesitan para exonerar a una persona.

Los jóvenes que trabajan en los casos que llegan a este proyecto lo hacen pro bono, es decir, completamente gratis, para los sentenciados o sus familiares. 

Contáctanos