Políticos del área de Los Ángeles están pidiendo que la estrella del presidente Donald Trump en el Paseo de la Fama de Hollywood sea removida después de que fue destruida recientemente.
El alcalde de West Hollywood John Duran y la concejal Lindsey Horvath revelaron una resolución el lunes pidiendo a la Cámara de Comercio de Hollywood que elimine la estrella del presidente “debido a su inquietante trato hacia las mujeres y otras acciones que no cumplen con los valores compartidos de la Ciudad de West Hollywood, la región, el estado y el país".
El Concejo Municipal votó por unanimidad, y el alcalde publicó en Twitter la aprobación de la resolución solicitando que la cámara elimine la estrella.
Duran usó las etiquetas “#horcruxdestroyed”, “#bellicose”, “#belligerent”, “#unAmericanvalues”, y “#MakeAmericaintoAmericaAgain”.
La decisión dependerá finalmente de la Cámara de Comercio de Hollywood.
La cámara nunca ha eliminado una estrella del Paseo de la Fama y rechazó una solicitud de 2015 para eliminar la estrella del comediante Bill Cosby. Trump fue honrado con su estrella en 2007, cuando participaba en el programa “El Aprendiz”, de NBC.
Con respecto al vandalismo más reciente, un hombre de Glendale acusado de dañar a la estrella de Trump en el Paseo de la Fama de Hollywood con un pico fue acusado el lunes de delito grave de vandalismo.
Austin Mikel Clay, de 24 años, será procesado en el centro el 15 de agosto. Si se lo declara culpable, podría enfrentar hasta tres años de cárcel, de acuerdo con la Oficina del Fiscal del Condado de Los Ángeles.
El pasado 25 de julio, aproximadamente a las 3:30 a.m., la policía recibió un informe del vandalismo en el Bulevar de Hollywood, cerca de la Avenida Highland. Testigos le dijeron a un canal de noticias local que un hombre que llevaba una caja de guitarra sacó un pico de la caja y rompió la estrella.
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Después de dañar la placa, el hombre llamó a la policía y le informó que había destrozado la estrella de Trump, informó un diario local. Él hombre dijo "hasta pronto" antes de irse de la escena, dijo al periódico la teniente Karen Leong de la división de Hollywood del Departamento de Policía de Los Ángeles.
Aproximadamente una hora más tarde, los oficiales dicen que caminó hasta la sede de la policía de Beverly Hills, se identificó y dijo que quería entregarse.
Fue la segunda vez que la estrella de Trump fue vandalizada en menos de dos años. En octubre de 2016, un hombre vestido de trabajador de la construcción aplastó a la estrella con un pico y un mazo. James Otis no impugnó el delito de vandalismo en febrero de 2017 y fue sentenciado a tres años de libertad condicional, 20 días de servicio comunitario y aceptó pagar 4,400 dólares por el daño.
Luego del vandalismo, el director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Hollywood, que administra el Paseo de la Fama, instó a los posibles vándalos a votar si querían hacer una declaración política.
“El Paseo de la Fama de Hollywood es una institución que celebra las contribuciones positivas de los miembros”, dijo el presidente y director ejecutivo, Leron Gubler. “Cuando la gente no está contenta con uno de nuestros homenajeados, esperamos que proyecten su ira de maneras más positivas que vandalizar un hito del estado de California. Nuestra democracia se basa en el respeto a la ley. Las personas pueden marcar la diferencia al votar y no destruir la propiedad pública”.
La estrella de Trump está cubierta actualmente mientras la someten a reparaciones.
