LOS ÁNGELES - La dueña de una compañía de servicios financieros se declaró culpable en el tribunal de distrito en Santa Ana por cargos federales relacionados con el desfalco de más de $1.5 millones de los fondos de sus clientes.
Elizabeth Jane Mulder, de 34 años, de San Juan Capistrano, se declaró culpable de "fraude telefónico y suscribirse a una declaración falsa de impuestos por no divulgar los fondos malversados al Servicio de Impuestos Internos", según Thom Mrozek, oficial de asuntos públicos de Estados Unidos de la oficina del Fiscal.
Los fiscales dijeron que Mulder, cuyo negocio proporcionaba servicios de contabilidad, impuestos y contabilidad, se ganó la confianza de clientes de pequeñas empresas, algunos de los cuales le permitieron controlar sus cuentas financieras.
"En relación con casi todas sus víctimas, Mulder convenció a los clientes a hacer cheques pagaderos a 'Pagos de Impuesto a la Renta' con promesas de que esos pagos satisfarían las obligaciones tributarias pendientes del IRS de los clientes y serían remitidos al impuesto federal, estatal o local apropiado", dijo Mrozek.
"Mulder depositó estos cheques en una cuenta bancaria que creó bajo el nombre de 'Income Tax Payments' y convirtió los fondos para su propio uso personal".
De esta forma Mulder creó "falsas personas" y dijo que estaba usando el dinero de los clientes para pagarle sus gastos relacionados con sus negocios, pero en realidad ella "simplemente estaba depositando el dinero de los clientes en su propia cuenta bancaria", dijo Mrozek.
"En total, el esquema fraudulento de Mulder resultó en el robo de aproximadamente $ 1,538,771 de varios negocios basados en Orange County, incluyendo JAC Wines en San Clemente, Kurtz-Ahlers & Associates en San Juan Capistrano y Andra Builders, Inc. en Costa Mesa", Mrozek dijo.
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Mulder utilizó el dinero en gastos personales como una casa de alquiler en Laguna Beach, cirugía plástica y vacaciones, dijeron los fiscales.
El fraude se produjo desde julio de 2009 hasta el mes pasado, según Mrozek.
Mulder debe ser sentenciada el 16 de octubre y enfrenta 23 años de prisión y una multa de $350,000.
