Advierten sobre llamadas que engañan y estafan

Cientos de personas inocentes caen en la trampa y son robados por miles de dólares.

Tenga mucho cuidado al caer en una trampa telefónica donde el propósito de los delincuentes es robarle su dinero.

Guadalupe Piedra vivió de primera mano lo fácil que es caer en manos de personas sin escrúpulos.

“Me contestó un muchacho joven y me dice hola tía, ¿cómo estás? Yo conteste quien era, y me dice soy tu sobrino. Le dije, ¿pues cuál de todos? Me dijo, el más guapo, el más trabajador, y dije ¡ay caramba”!, dijo la señora Piedra.

Después de un rato, Guadalupe creyó adivinar quién era.

“Le dije la mayoría de mis sobrinos hablan puro inglés y tu si hablas español, has de ser de los de Vicky, el contestó “ándale tía le atinaste”, ¿Eres Henry? Sí, soy Henry.

El supuesto Henry le dijo que acababa de aterrizar en el Aeropuerto de San Diego y que quería verla y le pidió su domicilio, y se lo dio.

Según Guadalupe, al poco tiempo le volvió a llamar y el supuesto sobrino le dijo que lo habían detenido y lo decomisaron de 20 mil dólares que llevaba por no reportarlos. Según el delincuente, la única manera de recuperar el dinero era pagar una multa de mil dólares.

“Me dijo, ¿tía por favor consígalo, lo necesito, si no que voy hacer? Yo iba a Chula Vista y pues sin dinero que voy hacer”, dijo el supuesto sobrino.

El hombre entonces le dijo a Guadalupe que las autoridades del aeropuerto no le permitían colgar y le daban solo 45 minutos para recibir el dinero, y que se tenía que apurar y seguir las instrucciones.

Si usted recibiera una llamada así, seguramente querría movilizarse rápidamente, y conseguir el dinero para ayudarle a su familiar, y es precisamente lo que saben los estafadores, por eso muchas veces les funciona el truco. Pero es importante que antes de enviar cualquier cantidad, asegúrese de confirmar quien es. Si le dicen que no cuelgue, desconfíe.

Un hombre compró un camión usado con garantía, sin embargo días después se descompuso, pero le dijeron que la garantía nunca se habia tramitado.

“Siempre hay que sospechar de ese tipo de llamadas y colgar inmediatamente para llamarle a esa persona o alguien que conozca”, dijo Bárbara Medina, trabajadora de la oficina del fiscal.

Y es precisamente lo que hizo Guadalupe justo antes de enviarle el dinero al estafador. Descubrió que el verdadero Henry no estaba en el aeropuerto, y mucho menos estaba detenido.

La señora Piedra dice que, con todo el descaro, cuando le dijo al impostor que se pusiera a trabajar, él le contestó, “si ya estoy trabajando tía”.

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