Cientos de residentes de comunidades cercanas a la clausurada planta Exide realizaron una protesta ayer en la tarde para exigir el cumplimiento del plan de limpieza prometido por las autoridades.
Los manifestantes mostraron su preocupación por la contaminación de sus comunidades y el efecto que está causando en sus familias, especialmente en sus hijos. Muchos consideran que las autoridades estatales siguen con los brazos cruzados, sin ofrecer soluciones.
“Hay mucha gente en nuestra propiedad, en nuestra cuadra, que está afectada, tiene autismo, problemas de desarrollo, los niños tienen problemas de desarrollo del idioma y mucha gente en mi cuadra que tiene cáncer o sea desproporcionadamente", dijo Marcia Martin, residente de Bell.
La planta fue clausurada hace dos años. Sin embargo, los residentes señalan que hasta ahora solo se han limpiado 2,500 casas de las aproximadamente 10,000 que resultaron afectadas, de acuerdo con las pruebas realizadas por las autoridades.
Al evento asistieron líderes políticos, comunitarios y religiosos, quienes afirmaron su apoyo a los residentes afectados hasta que el Departamento de Control de Sustancias Tóxicas (DTSC) y la empresa Exide lleven a cabo una limpieza exhaustiva.
"Necesitamos tener alguien otra agencia, otro departamento que va a dar los datos, que va a hacer la limpieza, y que va a compartir con la comunidad porque ahorita en este momento no se está haciendo", dijo Hilda Solís, supervisora del condado de Los Ángeles
