El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) en Los Ángeles dijo el jueves que la falta de cooperación de las autoridades locales sigue obstaculizando sus esfuerzos para poner bajo custodia federal a inmigrantes indocumentados que enfrentan cargos criminales.
La agencia dijo que las políticas de "santuario" estatales y locales resultan en la liberación de cientos de inmigrantes de regreso a la comunidad local después de sus arrestos por presunta actividad criminal.
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El alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, el jefe del Departamento de Policía de Los Ángeles, Michel Moore, y el alguacil del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva, han dejado en claro que no cooperarán con ICE y no entregarán inmigrantes indocumentados a la agencia federal.
"Independientemente de su estado migratorio, quiero que todos los angelinos sepan que su ciudad está de su lado", ha tuiteado Garcetti. "Aquí en Los Ángeles, nuestro departamento de policía no coordina con ICE ni participa en la aplicación de la ley de inmigración".
El director interino de ICE, Tony H. Pham, dijo que tales políticas "crean un puerto seguro irresponsable para los delincuentes extranjeros que buscan aprovecharse de los miembros más vulnerables de nuestras comunidades. La aplicación de la ley de inmigración se trata de aplicar la ley".
Las detenciones de inmigración sirven como una solicitud legalmente autorizada, en la cual una agencia de aplicación de la ley puede confiar, para continuar manteniendo la custodia de un inmigrante por hasta 48 horas para que ICE pueda asumir la custodia con fines de deportación.
De acuerdo con la política, todas las detenciones de ICE se envían con una orden de arresto administrativa adjunta o una orden de expulsión, según las circunstancias del caso individual, señaló la agencia.
