Una mujer acusada de secuestrar a su hija en Rochester, Nueva York, la semana pasada y huir con ella a San Diego será extraditada a su estado natal.
La fiscalía del distrito de San Diego dijo el martes que René Stong, de 32 años, había renunciado a su derecho a una audiencia de extradición y que el estado de Nueva York la extraditará. Está detenida sin derecho a fianza en la cárcel de mujeres de Las Colinas y comparecerá en la corte el próximo 11 de diciembre para verificar el estado de los arreglos de transporte a Nueva York para que regrese al estado.
Stong, quien no tiene la custodia de su hija, Laylani Ortiz, de 5 años, recogió a la niña de la escuela sin permiso el 15 de noviembre, según el Departamento de Policía de Rochester (RPD). La afiliada de NBC, WHEC News 10, informó que Stong se llevó a la niña del autobús escolar, lo cual no estaba autorizada a hacer.
Cuando la niña no regresó a casa de la escuela ese día, su familia llamó a la policía. El RPD identificó a Stong como una posible sospechosa de la desaparición de la niña y pensó que podría regresar a su casa en Rochester con la niña.
Eso no sucedió
La familia de la niña dijo a WHEC News 10 que Stong llevó un Uber a la escuela de Laylani. Después de sacarla del autobús, Stong y la niña tomaron el Uber hasta el aeropuerto internacional de Greater Rochester (GRIA).
Stong compró boletos de avión y dejó el estado con Laylani, volando a Detroit y luego a San Diego el jueves por la mañana. El RPD dijo que no se emitió inmediatamente una Alerta Amber, ya que los investigadores no creían que Laylani corriera el riesgo de sufrir lesiones o morir.
Inmigración
Los investigadores de RPD creían que la madre y la niña estaban en el sur de California. Los funcionarios estaban trabajando con las agencias policiacas en la región para encontrarlas, incluido el FBI, dijeron funcionarios de Rochester.
El 17 de noviembre, Stong fue arrestada por agentes del Departamento de Policía de San Diego en un Motel 6 en Little Italy, en San Diego, luego de que un empleado del motel la reconociera de un volante. Ortiz fue encontrada segura y en buen estado de salud y luego se reencontró con su abuela, que voló de Nueva York a San Diego.
