Los desiertos del mundo cubren casi un tercio de la superficie de la tierra y para sorpresa de muchos, no todos son arenosos.
Aunque muchos no la conocen, también existe la tundra helada de antártica y la línea costera del desierto de Atacama en Sudamérica.
Todos son científicamente catalogados como desiertos debido a que reciben menos de diez pulgadas de lluvia al año.
Hay cuatro categorías en los que se dividen debido a sus diferencias.
- Desierto sub-tropical, con temperaturas drásticas cambiantes de calor a frio, tienen poca flora y fauna, y los fuertes vientos predominan.
- Desiertos costeros, con temperaturas moderadas y veranos más largos, se encuentran cerca de grandes extensiones de agua o zonas montañosas.
- Desiertos semiáridos, con inviernos extremadamente fríos y veranos largos y secos, las cantidades de precipitación anuales son mínimas.
- Desiertos polares, comunes durante la era de hielo, la temperatura máxima durante la época de verano no alcanza ni los 50 grados Fahrenheit. Estos son el ártico y el antártico.
Lo cierto es que sin importar su categoría, los desiertos son visualmente, grandes extensiones representativas de la belleza de nuestra madre naturaleza.