A los líderes del gigante Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD) se les ha dicho que se espera que la inscripción disminuya significativamente durante la próxima década.
La última predicción sobre el declive en curso se presentó a la Junta de Educación en un taller de presupuesto el martes.
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La perspectiva surge cuando el distrito enfrenta decisiones sobre el uso de fondos de educación históricamente altos que se espera que sean temporales y negociaciones con el sindicato de maestros, informó Los Angeles Times.
DISMINUCIÓN DE MATRICULA ESTUDIANTIL
La inscripción en LAUSD alcanzó su punto máximo en aproximadamente 737,000 estudiantes hace dos décadas y ha disminuido a lo largo de los años a aproximadamente 430,000 estudiantes de K-12 en la actualidad.
Más de cien mil estudiantes dejaron las escuelas públicas de California en el año escolar 2021-22. El LAUSD también ha visto una caída constante por veinte años. Se teme que, para el 2030, habrá un tercio menos de alumnos.
Educación
La reducción en alumnos se debe a múltiples factores que incluyen el alto costo de la vivienda, la pandemia y que más niños están inscritos en las escuelas charter.
Se espera que la inscripción caiga alrededor de un 3,6% anual a un estimado de 309,000 en nueve años, según la presentación.
“La escuela elemental de mis hijos, hace 13 años era de 600 a 700 estudiantes y ahora son 500 o 400”, destaca Vicky Martínez, de la organización Parents Supporting Teachers. [En] La preparatoria éramos 2400 y ahora a duras penas 1,400”.
ASIGNACIÓN DE FONDOS
Los fondos estatales dependen de la cantidad de alumnos en los distritos y, con menos recursos, el panorama no se ve alentador.
“Se está gestando la tormenta perfecta”, dijo el superintendente Alberto Carvalho.
“El Distrito Unificado de Los Ángeles enfrenta una convergencia alarmante y una aceleración de la disminución de inscripciones y el vencimiento de dólares estatales y federales únicos, así como responsabilidades financieras continuas y crecientes”, dijo.
INQUIETUD DE LOS PADRES
La inquietud de los padres se enfoca en los posibles recortes en los programas académicos o el cierre de escuelas en el futuro.
“Por ahorita no se van a ver cambios dramáticos al momento”, señala Monica Garcia, miembro de la junta escolar. “Si hay decisiones de cómo manejar el dinero, el superintendente puede ofrecer cambios y la junta escolar tiene que considerarlo. Pero va a largo plazo”.
Carvahlo explicó que el distrito contrató a 10 mil empleados en los últimos cinco años, aun cuando perdió más de setenta mil alumnos.
Sin embargo, hay padres y representantes que consideran que se necesita contratar a más personal.
“Faltan maestros, faltan asistentes, faltan personas que trabajen en la cafetería, mantenimiento, limpieza. falta de todo”, dice Martinez.
